7. Cuando amas
Jade
Beso: Contacto o presión que se hace con los labios sobre una persona o una cosa, contrayéndolos y separándolos, en señal de amor, afecto, deseo, saludo, respeto, etc.
Leo la definición una vez más.
Cualquier persona me consideraría tonta por no saber lo que esto significaba cuando tan solo era una adolescente. Nunca había tenido una visión clara de cómo lucia el mundo a mi alrededor, afuera de las paredes de mi casa, entonces todo mis conocimientos eran gracias a las enseñanzas de Bianca y Bastian.
Si era cierto que había visto a mis padres darse un pico o con manos inquietas frente a mi sin pudor alguno. Pero ¿Por qué?, no lo comprendía del todo, ¿Acaso se trataba del amor que sentían?.
No podía entender el origen de dicho acto, ¿Como podría tratarse eso de amor si discutían todo el tiempo?. Durante mi estadía en esa casa pensé que ese era el concepto de una familia, un papá que trabajaba y nos golpeaba y una madre alcohólica y drogadicta que culpaba a mi padre de todas sus desgracias, en mi cabeza sólo estaba la excusa barata de que eso era amor porque a veces se besaban y pues dormían juntos cuando papá llegaba del trabajo.
Escúchame muy bien, papá no ama a mamá y mamá no ama a papá. El amor sana, no destruye.
Aquellas palabras de Bianca se habían quedado talladas en mi cerebro al igual de su larga charla sobre a quien debías besar y a quien no.
Besa porque amas, porque deseas, porque tú quieres. No se besa a quien no te merece, ni merece tu amor.
Bianca era una romántica empedernida, siempre releía los pocos libros de romance desgastados que mamá a veces le llevaba cuando en la biblioteca ya nadie los tomaba. No tenía más de diez pero era feliz con los que tenía, a pesar de que yo la veía como una mujer sabía, papá decía que era una estúpida y no sabía administrar su tiempo.
Aquel día cuando papá murió. Besé a Bastian porque lo amaba y quería que el lo supiera pero... yo sabía que estaba mal, mi corazón retumbaba pero mi mente negaba una y otra vez. Y ese acontecimiento que pensé atesorar con tanto valor, ahora me atormenta porque en realidad no sé qué significó.
Ni para el, ni para mi.
El es mi hermano y los hermanos no se besan en la boca. Los hermanos son eso; Hermanos, no novios, ni amantes, ni enamorados.
Pero papá era eso, mi papá, no mi amante, ni mi enamorado, ni mi novio. El me había arruinado, lo supe desde la primera vez que cerró la puerta con pestillo y me pidió que guardara un secreto, aquel que en inocencia pensé que era correcto.
Nunca lo hablé con nadie, aún no lo hago pero Bastian lo sabe. Porque el me esperaba a que saliera de la habitación para abrazarme y susurrarme cosas bonitas, me ayudaba a caminar hasta mi habitación y me llevaba hojas y acuarelas para pintar.
Bianca me pregunto vagamente una de las veces que la fui a visitar a su pequeña habitación alejada de el resto de la casa.
– ¿Papá te ha hecho algo? – Su mano tomó mi brazo esperando mi respuesta.
Ya no sabía medir mucho la fuerza con la que me tomaba, sabía que tenía buenas intenciones. Pero no se en que momento mi hermana mayor comenzó a darme miedo.
– ¿De qué?
– Bastian me dijo que te lleva a su habitación. ¿Que hacen?
– Nada.

ESTÁS LEYENDO
Inmoral
Teen FictionJade y Bastian. Los hermanos Roux que se entienden, se cuidan, se defienden y se aman quizá más de lo que deberían. El peso de una vida llena de desgracias solamente los preparó para confiar plenamente el uno en el otro, en nadie más. Pero cuando lo...