La chica había llegado muy temprano, había colocado a los chicos en sus camas, les había preparado una pastilla para la resaca y una botella de agua encima de la mesa, saludó a Dadán que abrió los ojos al verla a las ocho de la mañana trabajando, escondió a su mejor amiga en la habitación de las chicas, colocó los suministros de limpieza, se hizo una coleta alta y empezó su jornada.
Cuando, dos horas después, su hermana llegó, se sorprendió al ver la planta baja como los chorros de oro.
– Buenos días, Dadán, ¿qué ha pasado?
La mujer suspiró – Tu hermana ha madrugado para venir, al parecer tenía ganas de estar aquí.
Makino sonrió – Es una chica muy trabajadora, ¿no crees?
– Ya lo creo, me recuerda a tí. Espero que no se desperdicie en cualquiera.
– ¿A qué te refieres?
– A nada mujer, a nada. – la pelirroja se fue murmurando – Una chica tan perfecta con un profesor de surf tan idiota, si tan sólo me hubiera hecho caso...
– Shanks es perfecto – fue lo último que dijo Makino antes de marcharse.
En la octava planta, Tn se limpiaba el sudor de la frente y suspiró.
– ¿Agua?
– ¡Ay! Jo, qué susto. Ah, es usted señor Garp. Sí, muchas gracias.
– Lo siento por asustarte renacuaja. Vengo a darte las gracias.
– ¿Las gracias? Pero sí sólo he hecho mi trabajo.
– No me refiero a la limpieza, me refiero a lo de anoche.
Tn se tensó – ¿Anoche?
– No te hagas la loca ahora, vi como trajiste a Sabo a su habitación, y supe que saliste corriendo en cuánto pudiste. Luego trajiste a todos los demás. Eres una chica muy fuerte, e inteligente, podrías ser una gran marine.
– ¿Marine? Pero yo quiero ser profesora, me gustan los niños gracias.
– Oh, ya veo, buen oficio. Pero gracias por traer a mis nietos borrachos a la cama asegurándote de que vayan a sus camas.
– ¿No le molesta?
Él se rió – No. Debería, pero yo también fui joven una vez y quería pasarmelo bien. Además, están de vacaciones, deben pasárselo bien antes de que terminen sus carreras y deban ponerse serios en sus vidas. ¿Tú no bebiste?
– Zumo y agua.
– Deberías haberte puesto salvaje. ¿Y qué tal Sabo, Ace y Luffy?
– Bueno, Sabo me sorprendió, pero creo que necesitaba olvidar sus penas un rato. Ace, lo siento que lo diga, pero tiene un nieto salvaje. Y Luffy, creo que bebía de lo que había sin darse cuenta porque estaba muy puesto en bailar.
– ¿Alguno de ellos te llama la atención?
Ella se sorprendió, pero luego se rió – Disculpe Garp-san, pero ninguno de sus nietos cumple con mis expectativas de pareja.
– Los tres son muy diferentes, deberías acercarte a ellos y lo verás. Ya te preguntaré. Y ahora te dejo trabajar, yo también debo trabajar en mis asuntos.
– Sí, gracias.
– ¡Ah! ¿Y por qué no sacas esta tarde a Sabo a tomar algo? Me aburre verlo ahí siempre, y sé que tú podrías hacerlo.
Ella sonrió cuando el hombre se fue, y siguió con sus quéhaceres.
Sabo se levantó alarmado, pero un pinchazo en la cabeza lo echó para atrás, así es como se dio cuenta del vaso de agua y de la pastilla. Y de que todos tenían lo mismo.
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Frío en verano - Contratiempo 1 (Sabo)
FanficTn sólo debía mantener una mansión limpia, a su pequeña familia feliz, y hacer su verano tranquilo. Sabo hacía mucho no volvía a casa, pero no lo hacía solo. Sabo quería estudiar, pero la curiosidad y la vida lo sacaron de casa. No debían estar junt...