Memories ❥ MSK + KCW

Quince

Quizás Sakura no había entendido del todo bien a lo que ChaeWon se refería con “practicar besos", pero no podía quejarse, la mayor era extremadamente adorable.

ChaeWon comenzó en realidad practicando la cercanía, simplemente en cualquier momento en el que se sintiera segura y cómoda, tomaba las mejillas de Sakura y acercaba su rostro hasta juntar sus frentes, o frotar levemente sus narices.

ChaeWon estaba algo acostumbrada a el contacto físico con Sakura, así que no tuvo problemas con ello, sólo comenzó a hacerlo más seguido, y con otras intenciones.

Miraba los labios de la castaña, a veces se atrevía a dejar un beso sobre la nariz de la menor, y sólo se quedaba allí, sintiendo su cálida respiración contra sus gruesos labios.

Sakura solo la abrazaba, la tomaba de la cintura y dejaba a ChaeWon tener libertad en cuanto a lo demás, quería respetarla, a demás no podía presionarla, ChaeWon era tan sensible que hasta el más mínimo empujón podía terminar mal, iba a dejar que ella diera cada pequeño paso que quisiera.

Luego de un par de días con esa rutina, ChaeWon se atrevió de dejar cortos y pequeños besos en los labios de Sakura, a veces estaba algo nerviosa o avergonzada y daba besos en sus mejillas, en su frente o en su nariz.

Sakura sólo se quedaba allí, sonriendo como una idiota enamorada, que por supuesto, lo era.

Normalmente ChaeWon tomaba su rostro, dejaba uno o dos picos y después se iba a esconder un rato en su cuarto hasta que se sentía mejor.

Otras, dejaba unos cuantos besos en todo su rostro y admiraba como Sakura reía de forma tierna y feliz por aquellas leves cosquillas y las mariposas que volaban en su estómago.

Eso duró unas cuantas semanas, y Sakura comenzaba a disfrutar lo pequeña y linda que está siendo ChaeWon con ella, en sus pequeños gestos de amor.

Era adorable, su debilidad número uno, como siempre.

Sakura comenzó a sonreír un poco más, estaba más alegre, reía más fuerte, la abrazaba con más ganas, decía su nombre con tanto cariño... ChaeWon no podía evitar emocionarse al respecto.

ChaeWon se sentía orgullosa y feliz de que estaba logrando su cometido: hacer a Sakura feliz.

Luego de unas cuantas semanas, ChaeWon pudo besarla de forma más extendida, no tenía experiencia en los besos, así que dejó que Sakura profundizara sobre sus labios, sin más que leves mohines, habrá dejado unos cinco segundos, antes de apartarse, sintiéndose algo ahogada.

Escondió el rostro en el hombro de Sakura hasta que se sintió mejor.

Sakura a veces tenía que esperar días para recibir uno de esos besos de ChaeWon, pero no se quejaba, sabía que ChaeWon estaba haciendo lo mejor que podía y lograndolo de una manera exelente, se sentía feliz, muy feliz.

Después de años de verla tan lejos, ChaeWon estaba más cerca de ella que nunca.

No usaba su lengua en los besos, de alguna manera creía que eso asustaría a ChaeWon, y arruinaría todo su avance, así se dejaba llevar los besos de sólo labios, de un par de segundos de duración, y luego la abrazaba hasta que todos los nervios pasaban.

También ese se convirtió en su beso de buenas noches.

Luego de poco más de un mes de comenzar a "practicar besos" según ChaeWon, en una noche fría de invierno, protegidas por el calor del ambiente, de las sábanas y mantas gruesas, acurrucadas juntas en su pequeña porción de mundo, Sakura volvió a decir aquellas palabras que no había pronunciado en más de dos años.

Después de hundir su cariño en un beso que duró un poco más que los anteriores, que contó con un par de chasquidos y algo más de movimiento, al ver los ojitos miel de ChaeWon, mirándola fijamente, admirándola, con ese pequeño doblez debajo de ellos, tan hermosos y tan tierno, no pudo contenerse. — ChaeWon, te amo.