Capítulo XXV

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Había pasado ya un mes desde que Danzou se convirtió en Hokage, la situación era difícil todos aquellos que iban en contra del actual Hokage o que se oponía a seguir sus órdenes eran encarcelados, aquellos enemigos de la Aldea que eran capturados pasaban por torturas altamente violentasy después eran asesinados. Aquellos shinobis que salían a misiones tenían la orden de matar al enemigo sin compasión daba igual que fueran meros ladrones para ellos el castigo era la muerte, si no lo hacían los ninjas pasaban a ser castigados por no captar la orden.

La obsesión del Hokage de proteger la aldea a toda costa estaban pasando los límites, para él todo criminal debia morir ese tipo de escoria no deberian estar caminando sobre la tierra, quería que los shinobis de la aldea se combirtieran tal como eran los ANBU de raíz, seres sin emoción, sin sentimientos ni compasión alguna todo con tal de proteger el bienestar de su amada aldea.

Por aquella situación algunas aldeas dejaron de contratar sus servicios se les hacia exagerado aquel método no todo criminal merecía la muerte, algunos simplemente robaban por sobrevivir ese no era un motivo para acabar con sus vidas, toda esta situación hizo que la economía cayera considerablemente, afortunadamente tenian el servicio médico ya que al tener a una de la mejores médicos las aldeas pedían su ayuda para sus shinobis y civiles tambien algunas que otras aldeas estaban de acuerdo con su manera de gobernar y seguían contratando sus servicios, el comercio no se vio afectado dentro de lo que cabía la aldea seguía hacia adelante.

Muchos no tenian paz pues aquellos shinobis que no lo aceptaban vivían en constante vigilancia, algunos más que otros por obvias razones el equipo 7 o lo que quedaba de el era uno de ellos, debido a la alta demanda del hospital Sakura era obligada a trabajar más de lo debido, laboralmente la tenían explotada y como no, esa era una manera del Hokage tenerla vigilada, eso pensaba ella y no se equivocaba, a Naruto lo tenían de ayudante de Iruka en la academia y Kakashi junto con Shikamaru estaba encargado de organizar los exámenes Chunin, el Hokage no le daba misiones fuera de la Aldea pues prefería tenerlos cerca.

En el hospital se encontraba la pelirrosa con mirada perdida sumergida en sus pensamientos cuando se escuchó un golpe en la puerta, dió un respingo y luego le dio autorización de que pase quien sea que estuviera tocando, al abrirse la una chica de cabellera larga y rubia entró.

- Dios! Frententona estas fatal! - exclamó la rubia al ver a su amiga.

- Estoy bien Ino, gracias por preguntar - dijo con sarcasmo.

- Lo siento, pero te vez terrible - se sentó frente a la pelirrosa en la silla donde se sentaban los pacientes.

- Cómo no voy a estarlo? Me la paso todo el día aquí por si no te das cuenta - dijo irritada para después suspirar y relajarse - lo siento últimamente tengo unos cambios de humores que ni yo misma me aguanto.

- No te disculpes, tienes razón - suspiró la rubia cabizbajo.

- Y a ti que te pasa? - le preguntó la pelirrosa.

- S- Sai me terminó - dijo a punto de llorar.

- Qué?? Pero... porqué? - cuestionó sorprendida la ojijade.

- Dice que no se siente cómodo al tener que demostrar aprecio o sentimientos por alguien, que no se siente él y que mejor que estuviera con alguien que si me pudiera dar lo que el no puede darme - empezó a sollozar.

Sakura puso su mano sobre la suya en muestra de apoyo.

- Que extraño, si lo veía muy motivado leyendo Libros para aprender a relacionarse con las personas, incluso, me atrevo a decir que tú fuiste su mayor motivación.

- Pues no lo sé, desde hace unas semana se empezó a comportar extraño, se veía ausente como pensando en algo le pregunté intenté hablar con él, pero siempre decía que no era nada.

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