Capítulo VI

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Una semana había pasado desde que el Uchiha secuestró a la pelirrosa, se inició una búsqueda por los alrededores de la aldea de la roca con la esperanza de encontrar alguna pista otros, shinobis buscaron por los alrededores de la aldea de la hoja pues tenían entendido que Orochimaru tenía algunos escondites en esos lugares.

El equipo formado por la Hokage estaban a unos kilómetros de la aldea de la hoja pues habían localizados algunos escondites. Llegaron a un escondite subterráneo entraron en aquel lugar aún con la esperanza de encontrar a la pelirrosa en ese lugar ya que en los otros escondites donde habían estado no encontraron nada.

El lugar como todos los demás era amplio con muchas habitaciones por la cual tenían que dividirse para poder recorrer todo el lugar, a diferencia de los otros escondites este tenía indicios de que había sido habitado, el lugar no estaba polvoriento, había ropas, herramientas ninjas, comida.

Llegaron a lo que era la cocina del lugar y ahí se encontraba en una mesa restos de alimentos, todos se habían reunido ahí pues era el último lugar que faltaba por revisar.

-Estaban aquí - dijo el chico Inuzuca - Akamaru reconoció el olor de Sakura en la cama de una habitación.

-Si, pero fue hace días se nota por el estado de la comida - alegó Hatake.

-Al parecer parecer cuando se la llevó la trajo aquí, vino por algunas cosas y se fue a otro lugar - afirmó el Hyuga.

-Maldito!.. Haré que se arrepienta de habérsela llevado - dijo el Uzumaki cerrando sus puños con fuerza.

-Calma Naruto - ordenó el peligris - no ganas nada perdiendo los estribos, ya deben ir lejos lo más probable que estén en otra aldea.

-Si pero cual? - cuestionó Lee.

-Lo más probable es que sea la aldea del sonido - respondió Hatake

-Pues en marcha no me pienso quedar aquí haciendo nada - dijo el rubio.

-No te presipites Naruto, si Sasuke se llega a enterar que estamos cerca se moverá de sitio y se complicaran las cosas hay que ser cautelosos - habló el Nara.

-Entonces que hacemos? - pregunto Lee.

-Por lo pronto iremos a reportar a la Hokage de este sitio y formar una estrategia para buscar en la aldea del sonido - sugirió Nara.

-Bien, pues en marcha - concluyó Kakashi.

Todos abandonaron el lugar dirigiéndose a la aldea de la hoja, la desesperación y la preocupación les invadía pues no tenían ninguna pista y lo peor de todo es que no sabían que traía entre manos el Uchiha ¿Qué tramaba él llevándose a la pelirrosa? ¿Qué conseguía con aquello? ¿Qué haría con ella? Muchas preguntas se hacían.







Otro día más que la pelirrosa se despertaba en aquella habitación, siempre que despertaba y estaba por abrir los ojos rogaba con todas sus fuerzas de que todo fuese un sueño, pero la realidad le golpeaba de lleno cuando los abría y veía aquella habitación. De vez en cuando se ponía frente de la ventana a mirar hacia fuera, se dio cuenta de que estaba a una gran altura y solo árboles se veía en el lugar por lo que dedujo que estaba en una montaña y que era difícil de ver por aquellos árboles.

El Uchiha iba a llevarle la comida y como era de esperarse siempre terminaban en una discusión, era evidente que por el carácter que ambos tenían las cosas no iban a ser fáciles entre ellos.

Aquel día como todos los días el azabache se dirigió a la habitación de la ojijade a llevarle su comida.

La pelirrosa había salido del baño después de una relajante ducha, estaba envuelta en una toalla en eso la puerta se abrió dejando ver al azabache.

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