Volviendo a sentir

Capítulo IX

Después de un desayuno agradable Suiguetsu se ofreció a mostrarle el escondite a la pelirrosa, sonrió para sus adentros era precisamente lo que quería, necesitaba conocer todo de ese lugar.

El ninja de la niebla le mostró le dió un pequeño recorrido, por donde se encontraban las habitaciones, el área de entrenamiento, el despacho y algunos otros sitios, luego descendieron por unas escaleras el sitio estaba en penumbras unas lámparas de gas iluminaba el camino, a la pelirrosa le entró escalofríos el lugar de veía sombrío.

-A donde vamos Suiguetsu? - preguntó un poco asustada y abrazándose a sí misma había frío en ese lugar.

-No te tengas miedo en esta parte del escondite se encuentra el laboratorio de Orochimaru.

-De verdad? - dijo asombrada - y por qué me traes aquí?

-Solo es parte del recorrido - se encogió de hombros.

Al terminar de bajar las escaleras se encontraron con una puerta grande de metal, el peliblanco la abrió y entró al lugar seguido de la pelirrosa, esta se quedó asombrada con todo lo que vió. Estanterías con muchos libros y pergaminos, frascos con partes humanas y de animales, utensilios médicos, camillas, plantas medicinales y muchas cosas más.

-Wow... Esto es increíble, cuantas cosas - dijo mirando todo a su alrededor.

-Si, hay que admitir que Orochimaru estaba chiflado - dijo con burla el peliblanco.

-Nunca imaginé ver un lugar así, es tenebroso - dijo muestras acariciaba sus brazos.

-Lo cierto es que para nosotros ya es normal - replicó sin importancia.

La pelirrosa miraba todo el lugar era increíble todo lo que había ahí, en ese momento aprovechó para preguntar a Suiguetsu algunas dudas que tenía.

-Oye Suiguetsu... Como fue que conocieron a Sasuke?

-Bueno... - este se recostó de una mesa que tenía cerca - de todos nosotros yo fui el primero en unirme a él.

-Ah si? Y cómo fue? - cuestionó con interés.

-Cuando asesinó a Orochimaru yo estaba en el laboratorio, estaba sellado dentro de un tanque de agua, él me liberó, después de eso me uní a él. Nos fuimos hacia el sur a unos de los escondites donde Karin estaba a cargo, liberamos a los prisioneros que estaban ahí, Karin también se unió a nosotros. Aunque bueno, ella lo hizo por que le gusta Sasuke.

-De eso me pude dar cuenta, así como también de que no le caigo bien.

-No le hagas caso, solo te ve como una amenaza.

-Amenaza? - alzó una ceja.

-Pues si, piensa que le quitaras a Sasuke.

-Ja! Pues que no se preocupe ni loca me metería con él, además, a Sasuke no le importa nadie más que a él mismo.

-Pero por algo te tiene aquí no?

-Si, pero seguro quiere algo de mi, información o algo así - afirmó - pero que ni crea que me va a sacar algo.

-Bueno como decía, después de reclutar a Karin nos fuimos al norte en esa guarida Juugo estaba cautivo por voluntad propia.

-Y eso por qué? - preguntó confusa.

-Juugo tiene un sello maldito que hace que pierda el control, cuando esto sucede se vuelve violento y puede llegar a matar por eso prefirió estar aislado para no dañar a nadie. Sasuke al demostrarle que podía serle frente él decidió unirse a nosotros.

-Ya veo - dijo pensativa, pero aún había una duda que tenía - Y... Para qué los reunió a ustedes?

-Nos necesita para su venganza con su hermano.