Broken Wolf| Liam Dunbar

El inicio de Edalyn Argent

Liam colocó el cuerpo de Eda en un lugar seguro mientras él junto con el resto de la manada iban a encontrar a la bestia y evitar que asesine a alguien, aunque ellos resulten lastimados en el acto, pero no había otra manera, así es la misión, esa es su único objetivo desde que se volvieron parte de ese mundo sobrenatural que ninguno quería conocer pero que no tuvieron opción.

Y mientras nuestros valientes adolescentes sobrenaturales luchaban contra la bestia, los Argent contaban su historia a Lydia, Edalyn, soñaba con su pasado y su próximo futuro, conociendo al fin todos los detalles de lo que el destino le depara.

...

Eda cerró los ojos y se dejó llevar por los hilos de sus recuerdos, sumergiéndose en un sueño que la transportaba a su infancia. Se encontró caminando por un corredor largo y oscuro, lleno de puertas cerradas. Su corazón latía con emoción mientras buscaba la habitación de su madre.

Finalmente, encontró la puerta que estaba buscando y, con una mezcla de nerviosismo y alegría, la abrió lentamente. Al entrar, se encontró con una escena que le causó un nudo en el estómago. Su madre, sentada en una silla, la miraba con ojos distantes y una sonrisa apenas perceptible.

Eda se acercó con cautela, sintiendo un vacío en el pecho. A medida que intentaba entablar una conversación, la frialdad de su madre parecía envolverla. El amor maternal que anhelaba no estaba presente, y eso le dolía profundamente.

Sin embargo, Eda encontró consuelo y alegría en otros aspectos de su vida. Descubrió que podía llenar el vacío emocional a través de sus pasatiempos. Sus bromas y travesuras le brindaban una sensación de pertenencia y atención que ansiaba. Además, encontró consuelo en el arte, especialmente en el dibujo. Cada trazo en el papel era una forma de expresar sus emociones y sueños, y anhelaba convertirse en una diseñadora famosa algún día.

A medida que el sueño continuaba, Eda se dio cuenta de que, aunque no recibiera el amor maternal que tanto deseaba, tenía la capacidad de construir su propio camino y encontrar la felicidad en las cosas que amaba. El cariño que anhelaba se manifestaba en sus travesuras y en su pasión por el arte. Aquellos aspectos de su vida eran su refugio y su escape.

...

Eda se encontraba parada frente a las grandes puertas de la escuela secundaria, con su mochila llena de libros y su corazón lleno de ilusiones. Era el primer día de clases, y mientras cruzaba el umbral, podía sentir el aire lleno de expectación y nerviosismo.

El sonido de risas y conversaciones animadas llenaba los pasillos. Eda caminaba con timidez, mirando a su alrededor con ojos curiosos y maravillados. Era una niña ingenua, llena de inocencia y pureza, aún ajena a las complejidades del mundo que la rodeaba.

Sin embargo, pronto sucedió algo que cambiaría su día y dejaría una huella en su corazón sensible. Un grupo de chicas populares se acercó a Eda y notaron algo especial en ella: su pasatiempo, sus dibujos. Rápidamente, comenzaron a burlarse de sus creaciones, ridiculizando su inocencia y su amor por el arte.

Las palabras crueles y las risas hirientes resonaron en los oídos de Eda, amenazando con romper su espíritu sensible. Podía sentir cómo las lágrimas se agolpaban en sus ojos, pero luchó contra ellas, decidida a no dejar que la malicia de otros la derrotara.

En lugar de responder con ira o tristeza, Eda decidió tomar otro camino. Cerró los ojos por un momento y respiró profundamente, buscando dentro de sí misma la fuerza y ​​la confianza para enfrentar la adversidad. Recordó las palabras de su hermano, que siempre le decía que su creatividad era un regalo especial.