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Los Angeles | 29 de Abril── Mackenzie Barker

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Los Angeles | 29 de Abril
── Mackenzie Barker.

Estoy ahora mismo en la casa de Tom, quedamos en ver películas, comer chucherías y chismear para olvidar un rato el estrés, según él. Yo solo lo aproveché para pasar un tiempo con él ya que se irá a México a grabar unas escenas para su película, él dice que no son muchas, pero esas cosas suelen tardar y no sé cuándo volverá.

— Pasado mañana me iré a México, Mack. — me dice Tom.

— De verdad lamento no poder acompañarte. Pero bueno, no te vas solo, te vas en buenas manos — moví las cejas de arriba hacia abajo.

— En serio debes parar con eso, Amelie lo más seguro es que irá a hacer otras cosas. Cierto, ¿ya le comentaste que no irás? — suspiré — Mackenzie...

— Lo olvidé, mierdaaa. Lo más seguro es que me matará.

— No lo dudes, hermana. Ella quería que tú la pasaras bien y que tuvieras un poco de diversión... — le di una mirada matadora — ¿Qué? Yo no estoy diciendo qué tipo de diversión, Mack, tú eres la que entendió mal.

— Ajám, lo que tú digas, Tommy — rodé los ojos — Creo que ya es hora de irme — me levanté del sillón.

— No te irás, ya es muy tarde, y como hermano mayor tengo que cuidarte — toma unas palomitas y las come — te dormirás en mi habitación, y yo en la otra, o como tú prefieras y te sientas más cómoda.

Me estiré — Mmm, creo que sí me dormiré en tu habitación, tu cama es bastante cómoda —di una sonrisa floja.

— ¿Ya quieres dormir? — asentí — Bueno, vamos a dormir — Tom me llevó a su habitación, me prestó ropa y se fue, estaba por ya dormir cuando tocaron la puerta — Perdón, Mack, se me olvidaron unas cosas.

— No te preocupes, Tommy.

Agarró su pijama, cargador y otras cosas. — Bueno, ahora sí, ya está. Hasta mañana, linda, que descanses — estaba por irse pero lo detuve.

— Tom... - él respondió con '¿Mmm?' — Puedes quedarte un momento, solo si quieres.

— Claro que sí, ¿qué pasa? — lo abracé — ¿Te pasó algo? Sabes que no me molestan tus abrazos pero rara vez sueles hacerlo.

— No pasa nada, solo quería darte un abrazo, eres un buen amigo y te lo mereces — sonreí.

— Gracias, supongo. ¿Segura que es solo eso? — respondí con un 'Sí' — Está bien, te creeré, pero bien sabes que puedes decirme todo lo que quieras, Mack. — asentí — Te quiero mucho, borrego.

La Modelo ── Peso PlumaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora