Friends|Larry Stylinson| *en Edición*

"Mascaras"

Dos días pasarón desde que me quede internado en la enfermería; más de los que debería; pero por indicaciones del director a la enfermera, debería permanecer ahí ya que no sabían si podría tener "daño cerebral" por los golpes que me dio su jugador estrella.

No era nada cómodo permanecer acostado todo el día; que aunque me estuviera mensajeando con Niall entre sus clases y sus recesos, no era del todo divertido, ni siquiera televisión había; y lo que menos quería era llamar a mi madre. Solo hasta la noche Niall venía a cenar conmigo y a contarme de todos los chismes que se sabía, restándole importancia a los libros con tareas que me dejaba sobre la mesa auxiliar.

Los chismes parecian ser su actividad favorita; ni se diga su emoción cuando le dije quién había venido a verme hace dos noches, para él fue impresionante y difícil guardar el secreto de que Louis había venido a verme, no podía creerlo.

Yo que no lo conocía tanto como él, me parecía tan extraño todavía; no podía ser que después de la golpiza que nos dimos, prefirió venir a disculparse y hacer un acuerdo para estar en paz, en lugar de seguir asesinandome.

Tenía sus palabras en mi cabeza desde que vino, quería creer que eran sinceras y verdaderas pero rastros de duda rondaban aún en mi mente, atormentándome, ¿Qué tal si era una trampa y me esperaba una golpiza con el equipo de fútbol? No tenía la suficiente fuerza para defenderme y menos de tantos.

Podría decir que no es sano sobrepensar en si me iban a asesinar como en las tipicas peliculas con bullies americanas pero esto es nuevo para mi; en mi vida me había tenido que defender, por lo que se me hacía dudoso.

Era probable que fuese una exageración pero fielmente lo creería, no conocía a Louis lo suficiente como para poder tomar su palabra como dicho y hecho, que viendo sus cambios de humor tan repentinos; me confirmaba levemente que fuese bipolar. No era del todo sorpresa, era un cliché que el líder del equipo fuera un desequilibrado mental, no podía esperar tanto de un idiota de novela.

Aun con todo lo pasado, ya me sentía fastidiado de permanecer en cama pero con un poco de cobardía, también quería seguir escondido en la enfermería; no sentía tanta prisa por volver al día a día y menos a la recamara compartida.

Voltee a ver a la enfermera que estaba leyendo una revista de chismes local; esta estaba absorta de todo su alrededor, concentrada en los quiz de amores adolescentes o la próxima película que saldría al cine. Pero el ruido del teléfono de la oficina la hizo pegar un pequeño brinco en su lugar, teniendo que dirigir la mirada a mi al darse cuenta que la estaba mirando.

Apenado me puse a ver el resto de la habitación en lo que ella contestaba el teléfono; solo escuchaba su voz en susurro, cómo si no quisiera que escuchará lo que ella respondía; hasta que terminó la llamada y al escuchar sus pasos, voltee a ella.

Con una sonrisa amistoso se acercó a mi, teniéndola confianza de revolver mis rulos - El Director quiere que ya regreses a tus labores, le pase tu estatus y dijo que ya fue suficiente.

Resignado por sus palabras; la enfermera me paso mis pertenencias para que pudiese vestirme y darme el alta, no sin antes hacerme una última revisión para comprobar que todo estuviese bien.

-¿Está segura que es todo?, ¿no tengo que quedarme otra noche más?-Pregunté mientras ella revisaba mi vista.

-No, ya es todo Harry-Dijo sin más, al tomar unas notas médicas que tenía aún lado-Te entregaré un justificante y ya podrás irte-Dijo arrancando una nota y entregándomela.

Solo le pude decir un ligero Gracias antes de salir de la enfermería con mis pocas pertenencias para así, irme a la recamara.

Camine lo más lento que podía para no apresurar el tiempo; si me sentía aliviado de poder volver a respirar aire fresco y no estar pegado a las sábanas pero, el no saber si las palabras de mi compañero eran sinceras, me dejaban como una gallina, los pelos de mi cuerpo estaban erizados mientras pensaba en todas las formas en que podría asustarme ahora, sino golpearme.