𝐀𝐋𝐋 𝐈 𝐖𝐀𝐍𝐓 𝐈𝐒 𝐘𝐎𝐔, tom kaulitz.

𝐅𝐎𝐔𝐑.

Después de hablar con Bill, me despedí de los chicos y de su mánager, para luego irme con Melanie de vuelta al hotel.

Empezaba a arrepentirme de mí desición, no es que no quisiera pasar tiempo con los chicos, bueno, algo así, no quería pasar tiempo con Tom. Se que si el y yo estamos en el mismo lugar alguna discusión o problema iba a ocurrir, y no tenía tantas ganas de eso. Pero ya le dije a Bill que si y ya no podía cambiar de opinión.

Dejando a Tom a un lado, tal vez está noche salga bien, y no desastrosa por algún conflicto. Me encantaría charlar más con Bill, Gustav y Georg. Me habían parecido personas muy interesantes y divertidas dentro de lo poco que había hablado con ellos.

No quería ir muy informal, pero tampoco demasiado formal. Opté por ponerme unos pantalones tiro bajo negros, un top blanco sin mangas y unas zapatillas blancas, algo básico.

No quise sacarme las ondas naturales de mí cabello, asi que me las dejé y me retoque un poco el maquillaje, algo de gloss y rubor rosado.

De pronto mí celular comenzó a sonar, pensé que era Bill, avisandome que ya estaba abajo, ya que habíamos intercambiado números antes de que me fuera del estudio. Pero no, no era el pelinegro, era mí hermanita, Olive.

Emocionada contesté el teléfono.
-¡Olive! Hace mucho no hablábamos, ¿Cómo estas?- la saludé con una notable felicidad en mí tono.

-¡Hola Jess! Algo... bien... ¿Y tú?- La pequeña dudó la respuesta, lo cual me preocupaba demasiado, temia que mis padres le hayan hecho algo.

-¿Porqué dudaste en responder, Olive? ¿Estás bien?- Le pregunté, temiendo su respuesta.

-Estoy bien Jess, solo que te extraño, espero verte pronto.- Me explicó, lo que me hizo quedarme más tranquila. Odiaba no ver a mí hermana, odiaba tener que dejarla con mis padres, odiaba todavía no conseguir la tenencia de mí hermana.

-Esta bien Olive... ¿Recuerdas la promesa que te hice? La de que te ibas a venir a vivir conmigo.

-Si.

-Bueno, no falta mucho para que eso pase, ya falta poco.

-Eso espero Jess, aquí te estaré esperando.- Un sonido de algo estrellarse contra la pared interrumpió a la niña. -Ehh... Me tengo que ir Jess, adiós.- Cortó finalmente la llamada. Seguro nuestros padres estaban peleando de vuelta, y el lanzar objetos ya se había vuelto algo regular en sus conflictos. Suspiré con cansancio y dejé caer el teléfono en la cama.

N A R R A D O R
O M N I S C I E N T E

Pasaron unos minutos luego de la llamada y me llegó una notificación, era Bill, ya estaban abajo. Agarré rápidamente un bolso, que anteriormente había dejado separado y salí rápido de la habitación, atravesé las grandes puertas de vidrio y pude divisar a la banda. Habían venido a recoger en un lindo Audi negro. Tom estaba al volante, Bill de acompañante y los demás iban atrás.

En cuanto Bill me vio se bajó automáticamente del auto, me recibió con un abrazo y abrió la puerta trasera para que pueda entrar. Le agradecí con una dulce sonrisa y me adentré en el vehículo.

-Hola Jessica.- Saludaron Gustav y Georg al unísono, sonriendo.

-Hola chicos, ¿Como les fue en el ensayo? No los pude escuchar tocar al menos un poco, el coreografo no me dejaba siquiera tomar agua.- Pregunté, seguido de una risa.