Naruto

Historia paralela 5.1- Donde el sueño y la realidad se encuentran (1)

El broche que Naruto planeaba darle a Sasuke como regalo de cumpleaños tardó mucho más de lo que esperaba en completarse. El artesano que dibujó el diseño resultó herido en un accidente repentino y tuvo que dejar de trabajar por un tiempo.

El joyero envió una carta explicando la situación y afirmando que podían entregar el diseño a otro artesano si lo necesitaba con urgencia.

Naruto lo consideró por un tiempo, pero por alguna razón, no quería tener a otro artesano a cargo de hacerlo. Así que decidió dejar el diseño al artesano original aunque tuviera que esperar más.

Justo cuando casi se había olvidado de él, el broche completo fue entregado a la mansión.

Naruto colocó el broche envuelto en lujoso terciopelo sobre la mesa y presionó su mano sobre su turbulento corazón para regular su respiración. Luego lo recogió con cuidado, como si fuera un tesoro muy preciado, y se lo acercó a la cara.

'Estoy en lo cierto. Es lo mismo.'

Naruto no hizo más pedidos al artesano ni le pidió al artesano que agregara nada. Él solo se lo dejó al artesano y esperó. En otras palabras, el broche fue completamente el trabajo creativo del artesano.

A pesar de eso, lucía exactamente como el artículo que Naruto guardó durante muchos años en su sueño. No importa cómo lo mirara, incluso cuando cerraba los ojos para recordar, se veía igual. Mientras miraba el objeto que tenía en la mano, sintió que iba y venía entre el sueño y la realidad.

'¿Era esto originalmente suyo...?'

Si ese era el caso, entonces realmente no tenía idea de cómo su cosa llegó a su joyero.

Naruto no tenía ninguna relación con él en su sueño. Realmente nunca había tocado su collar ni una sola vez. Y en cuanto a Sasuke, probablemente ni siquiera recordaba que existiera alguien como él. En su sueño, él era alguien completamente fuera de su alcance.

Kimimaro se acercó a Naruto con cuidado mientras estaba perdido en sus pensamientos.

-Mi 2do señor. Los dos jóvenes maestros están de vuelta-.

-¿Solo los niños están de vuelta?-.

Naruto volvió a envolver el broche en terciopelo y lo metió en la caja.

-Sí. Solo los vi a los dos bajar del carruaje-.

-Él no dijo que regresaría tarde hoy...-

Naruto le dio la caja a su sirvienta y le dijo a la sirvienta que la llevara a su dormitorio, luego salió de la sala de recepción.

●•●•●•

Damian entró en la mansión y una sonrisa floreció en su rostro mientras observaba a la chica que bajaba corriendo del segundo piso. Estaba listo para abrazar a su hermana, corriendo hacia él con su deslumbrante cabello dorado revoloteando detrás de ella. Damián abrió los brazos, pero su hermana traicionó sus expectativas.

Evangeline se detuvo a unos pasos de Damian y le gritó.

-Hermano mayor, ¿impediste que Jude viniera?-

Las mejillas perladas de Evangeline estaban rojas. Su expresión no era la de una linda hermana saludando alegremente a su hermano que regresaba, sino la de furia e indignación.

La mirada desconocida en el rostro de su hermana menor hizo que Damian se detuviera y no pudo decir nada. Porque estaba tan desconcertado que ni siquiera escuchó lo que dijo Evangeline.

-¿Que..?-.

-¡Escuché que el hermano mayor impidió que Jude viniera aquí! ¿Realmente hiciste eso?-