Capitulo 4

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- ¡EMILY LEVÁNTATE YA! - le digo, mientras le pego lo más duro que puedo con una almohada.

-¡QUE MIERDA TE PASA! - dice, ella mientras se cae de la cama.

- Llego Kaitlyn y está preguntando por ti.

- Y ¿No podías decirme primero eso? No tenías por qué pegarme - dice Emily, mientras se levanta.

- Muévete - le digo para que se apresuré.

Ella se acomoda el cabello un poco, después se mira mil veces al espejo... La voy a terminar matando algún día.

-Lista - dice Emily, mientras sale de la habitación.

Bajamos las escaleras, y encontramos a Kaitlyn en la sala, entretenida con su celular.

-¡Hola! - dice Emily muy emocionada.

-¡Hola! - responde también muy alegre.

Emily le da un gran abrazo, y luego se dirige a mí.

- Kaitlyn, ella es Amber - dice Emily.

- Hola - dice Kaitlyn, mientras me dedica una hermosa sonrisa.

Dios... Cualquiera podría quedarse embobado con esa sonrisa...

¿Qué estoy diciendo?...

- Hola... - digo algo tímida.

¿Qué me pasa?...

- ¿A dónde iremos? - dice Emily, mientras mira su celular.

- Pues no tengo muchas ganas de salir - dice Kaitlyn, mientras se sienta en el mueble.

- Yo igual - digo, mientras me siento al frente de Kaitlyn.

- ¿Que se supone que haremos aquí? Son casi las 7 pm. - dice ella mientras se acuesta en el mueble.

- ¡Mierda!- me paro rápidamente - A las 7 llega mi madre, me va a matar si no estoy.

- Relájate, dile que tuviste que salir a hacer algún trabajo o algo así - dice Emily, muy tranquilamente

- ¿Eres idiota? Estamos en vacaciones - le digo, mientras camino de un lado a otro por la sala

- Da igual, siempre te castigan y ya - dice Emily, sin ninguna importancia.

- ¿A ti te parece muy bien que la castiguen? - dice Kaitlyn, mientras se dirige a Emily, no muy contenta.

Emily no le presta atención, solo se limita a hablar por su teléfono.

Subo rápidamente las escaleras voy a la habitación de Emily, tomó mis llaves y bajo rápidamente.

- Adiós - digo algo enfadada, Emily no me responde, así que me dirijo a la puerta principal.

- Amber espera - dice Kaitlyn, mientras sale conmigo de la casa.

- ¿Qué?- solo me limitó a decir.

- ¿Vives muy lejos? - dice, mientras me mira fijamente, con sus hermosos ojos

- Algo...

- Te puedo pedir un taxi - me dice con toda la paciencia del mundo.

- Vale... - digo, pero esta vez más calmada.

- Bien - me da una de sus perfectas sonrisas y llama para pedir el taxi.

Mientras, la observó, no puedo dejar de mirarla.

Su perfecto rostro, sus hermosos ojos, su hermoso cabello, tiene un cuerpo que podría envidiar cualquiera, y su sonrisa, con esa sonrisa mataría a cualquiera.

- Listo, no tarda en llegar - dice mientras me sonríe, dios...

- Gracias - le digo, mientras la miro detalladamente.

- No es nada, solo llame un taxi - vuelve a sonreír.

- Ni siquiera me conoces - le digo, mientras miro alguna parte del suelo.

- Ya habrá tiempo para eso - dice mientras me mira fijamente.

Me dedica otra sonrisa.

Yo le devuelvo la sonrisa y en ese instante llega el taxi.

- Bueno... Adiós y gracias - me limito a decir.

¿Porque me pones tan nerviosa?

- No es nada, cuídate, espero verte pronto - me vuelve a sonreír.

- Tenlo por seguro.

¿Porque Ella?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora