Forever [ Fan fic ]

07| Roces.

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ALGO DENTRO DE MI me decía que esta noche iba a ser intensa, pero no mala.

Solo queria beber hasta olvidarme quien soy, aún no procesaba lo que estaba pasando, había ido al concierto de mi ex novia, de la cual sigo enamorada, y que además de eso, estaba a unos metros pidiendo algo, mientras se daba la vuelta cada dos segundos para echarme una mirada, la cual me ponía, y mucho.

Estoy un poco alterada por el calor.

Mientras pensaba miraba al rededor, desde aquí podia ver a Emma y a Mariana bailar, eché otra ojeada a ver si veia a Mauro, pero no había manera, es como si se lo hubiese tragado la tierra.

-No intentes buscar a Mauro con la mirada, ese chico en cuenta puede, y por Emma, no te preocupes, está en buenas manos, como tú- la voz de Vicky me hace volver a la realidad.- aquí tienes, es Piña colada, con mucho alcohol, yo me he pedido lo mismo, tranquila, sabe bien.- me sonrie para luego sentarse a mi lado.

Bebo un poco de mi bebida y dios, está rico no, lo siguiente.

(Según lo que he leído en Google, la piña colada es una bebida de puerto rico)

-

—¿Esta bueno, verdad?- me dice riendo mientras me mira- es mi bebida favorita.

-Si, está muy bueno, no me lo esperaba.

-te dije que confiases en mi.- bromea mientras toma de su vaso.

-Siempre confío en ti.- la digo mientras la miro.

-Me alegra oír eso, princesa.- sonríe aún más.

Nos quedamos hablando y riendo mientras bebemos, hablamos de lo que hemos echo estos dos años, así, pasaban las horas y ya íbamos borrachas, aunque yo más, mientras nos reíamos, empezó a sonar Lisa, una de sus canciones.

Me agarró de la mano y nos levantamos como pudimos, bajamos las escaleras y fuimos hacia la pista donde estaban Emma y Mariana bailando muy pegados.

Los estaba viendo, me mantenía de pie como podía, a todo esto, la chaqueta me la había quitado al entrar horas atrás, hacia demasiado calor.

Mientras los observaba una mano me agarró de la cintura y me llevo a una esquina, donde no había nadie.

Era Vicky, que sorpresa.

La sonrío coqueta, y le paso los brazos por el cuello mientras cantamos su canción.

Nuestros labios están muy cerca, pero nuestros cuerpos se tocan, acerco mis labios hacia su cuello para comenzar a dejar besos.

Dios. Santo.

Su respiración está acelerada, y la mía también, quiero que sienta, lo que ella me ha echo sentir horas atrás en el coche.

Voy dejando besos, en su cuello mientras voy subiendo por su oreja, cuando llegó a ella, le muerdo el lóbulo, ella suelta un jadeo, sus brazos me agarran de la cintura fuerte y me pega más a ella.

-Si sigues jugando con fuego, te vas a quemar, Ashley.- me dice mientras me mira con deseo en los ojos y me.

-Si el fuego eres tú, estoy encantada de quemarme- la sonrío inocente.

Nos quedamos mirándonos, estos momentos son mis favoritos, el mundo desaparece, solo somos ella y yo, es como si los dos años separadas no hubieran existido.

Todos los momentos juntas vienen a mi mente.

La vez que nos conocimos en el colegio.

Cuando me invitó a salir a comer helado por primera vez.