𝗜𝗙 𝗜 𝗞𝗜𝗟𝗟 𝗦𝗢𝗠𝗘𝗢𝗡𝗘 𝗙𝗢𝗥 𝗬𝗢𝗨, yang jungwon ( 🌪️ )
━━espero que esto te haga feliz, porque ya no hay vuelta atrás... ⋅₊˚.
Jungwon era inocente, pero Suh Inara, era completamente culpable de todas y cada una de
las desgracias en la...
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Suh Inara lo tenía todo. Nunca había carecido de nada, nunca se había tenido que preocupar por ver la etiqueta antes de comprar algo, nunca se le había negado ni una sola cosa. Pero nada de eso se comparaba al gran vacío que sentía, a la voz insistente de su cabeza y a lo asustada que aveces se sentía por todo lo que su mente maquinaba; A Inara le gustaba justificar su actitud, sus pensamientos retorcidos y su notoria indiferencia con el hecho de que sus padres la habían abandonado desde que era una niña. Y con abandonar, se refería a que no los veía más de dos veces en un mes, gracias a que ambos pasaban la mayor parte de su tiempo viajando por sus trabajos. Tomaba y culpaba a la ausencia como la primera causa de su delirio.
Se sentía enferma... Pero no le desagradaba estarlo.
Le gustaba el dolor, se dio cuenta de eso la primera vez que Minho comenzó a molestarla. Solo tenía doce años. Se dio cuenta de que también le gustaba ver a las demás personas sufrir... Le gustaba causarlo.
Por un tiempo pensó que Minho era igual a ella, porque con el pasó de los años él parecía disfrutar demasiado golpearla e insultarla. Pensó que al chico también le parecía excitante el lastimarse el uno a otro solo para alcanzar su límite de una manera más rápida. Pero estaba equivocada... Porque a él no le había parecido placentero en lo absoluto la primera vez que la chica intentó cortarlo o morderlo para infringirle dolor. Aún así, aceptaba hacerlo porque sabía que a ella le gustaba. Le parecía que solo era una manía algo extraña de su personalidad tan tímida y cohibida, pero lo cierto era que ni siquiera él la conocía realmente. Nadie conocía a Suh Inara.
Jungwon no disimulaba ni un poco mientras se mantenía observándola fijamente, apoyando su mejilla en la palma de su mano mientras escuchaba la clase de la profesora Jung de fondo. Inara sabía que tenía su atención, siempre lo supo. Le gustaba fingir que no podía notar la manera en la que la veía... Y le gustaba imaginarse el rostro adolorido de Jungwon después de aquella golpiza.
No entendía porque desde que él había llegado, todo en ella reaccionaba de una manera sumamente inesperada. Jungwon le hacía sentir algo que nunca antes había experimentado realmente, más allá de que le excitaba el hecho de imaginarlo haciéndole daño, lastimándola de muchas maneras.
Le gustaba. Tal vez mucho más de lo que su trastornada cabeza podría comprender.
Inara es inocente. Y lo seguiría siendo hasta que todo el mundo pudiera ver el monstruo que realmente era.
