Tras ir de viaje a Red line , nuestra protagonista conoce las consecuencias de pasear sola por dicho lugar , pero recibirá la ayuda de un enigmático y poderoso hombre.
Una simple habitante de Dressrosa y algo que la une al hijo de Big Mom.
Las noches en la Isla Whole Cake eran sumamente frías, más con la ventana abierta. Las cortinas rojas permanecían inmóviles.
No tenía idea de la hora , pero entraba luz de luna. Seria de madrugada.
Katakuri descansaba muy relajado a mi lado , los rayos del sol reflejados en la Luna lo iluminaban de una manera tenue. Acaricie sus mejillas.
—¿No puedes dormirte , hermosa? —Me gusta verte dormir , tu rostro se relaja. —¿Que dices ,Ocean?—preguntó incrédulo. —Siempre tienes el ceño fruncido cuando estas despierto. Igualmente, me gustan todas tus expresiones.—atrapé su rostro en mis manos y lo bese suavemente.
Katakuri respondió a mi beso , y acarició mi espalda desde la cintura baja hasta mi cuello.
—Estoy loco por ti. No sabes cuan conforme me siento con la decisión de haber asistido a la subasta aquel dia... —He oído las cosas que los Tenryuubitos les hacen a los esclavos...en verdad salvaste mi vida. —No quiero siquiera imaginarme un escenario así...ummm—me observó detalladamente. —¿Qué pasa? —Te has puesto la pijama que más me gusta , ven acá.
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Algo me decía que debí decirle sobre la invitación. Pero no lo hice. Solo me deje llevar por el momento.
Katakuri tenía la idea de mantenerme allí , solo esperando su regreso , si bien el castillo tenia diversas actividades , no podía estar sola todo el tiempo. Leer me apasionaba , nadar también , aun así , ocupar todo el día con esas actividades se haría pesado.
¿Tan grave es que sea la hija de Judge?
Además , Reiju mencionó abiertamente que despreciaba el trabajo de su familia. Pero no tenía la valentía de replantearse toda su vida. Ella claramente no era como su padre.
En el centro de Whole Cake
—Hola Ocean —Hola Reiju ¿Has esperado mucho? —Para nada , ven vamos , solo se tiene que abrir el puente.
Me sentí terriblemente mal cuando me encontré con ella. La angustia que agobió mis sueños un mes atrás volvió a hacerse presente.
No debo estar aquí.
No debí mentirle a Katakuri.
No sé quién es realmente ella.
Pero me encontraba caminando a su lado, un tanto pálida , mis manos estaban inquietas y no dejaba de mirar a la gente de un modo extraño.
—¿Te encuentras bien , Ocean?
Estaba mentalizándome para solo almorzar con ella, ver su colección de ropa y nada más, solo irme y regresar para esperar por Katakuri.
El castillo Germa era impresionantemente tecnológico y fuera del alcance de mi comprensión.
—Ven , quiero mostrarte el lugar...Oye ¿qué es lo que haces viviendo en la tenebrosa isla komugi?—preguntó mientras caminábamos por la casa. —Es una historia complicada... —Bueno , bueno , espera que preparare algo para beber ¿Quieres ir a la barra?
El salón era como de una película futurista , se podían cambiar las luces y había cientos de botellas en un gran bar , que poseía un espejo detrás. Lucía como un boliche.
—Es de otro mundo tu casa.— me ofreció el servicio de la cocinera, pedí una pizza para compartir con mi pelirosada amiga y nos sentamos a esperar mientras bebíamos un suave trago preparado por Reiju.
