Capitulo 12 [Declaración]

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-Sasuke, no tienes que hacer esto, como heredera del clan debería ser solo yo la que se ocupe de un traidor-. Mencionaba Hinata hacia su compañero explicando que no tenía que ayudar a la familia Hyuga en esto.

-Ya lo dije antes, no perdonaré a nadie que vaya contra la aldea, además, somos el equipo Taka (Alcon), nuestro deber es ayudarnos, después de todo la cita que tuvimos fue con la idea de reafirmar esto -. Afirmaba Sasuke preparándose para salir junto a su camarada a buscar al desertor.

Puede que esas palabras, adherida con la seriedad típica del Uchiha, fuera suficiente para convencer a la Hyuga, quien mostraría una leve sonrisa.

-Entonces permíteme ser la líder, esta vez-. Pedía la pelinegra aceptando que ellos se involucraran como grupo.

-Claro, tus conocimientos de las habilidades de tu familia será muy útil, estaré a tus órdenes-. Exclamaba el Uchiha que parecía haberse planteado el cambio de jefe en la agrupación.

Después de dejar en claro la modificación del dirigente en el equipo.

-Cuidado, si bien gracias al Byakugan podemos buscarle, él también puede utilizarlo para evadirnos o atacarnos-. Advertía Hinata usando sus ojos con apoyo de los de su socio.

-Sí, entra en mi rango visual, preveré sus movimientos-. Aclaraba Sasuke muy concentrado lo más posible en sus alrededores.

-¿Por qué alguien de nuestra familia conspiraría contra la aldea?-. Se preguntaba la Hyuga una duda que no lograba entender.

El repentino silencio podría indicar muchas cosas que todas terminarían en el mismo resultado.

-Asalto de las 8 puertas (Hachi Mon Hou Gueki)-. Era lo que un hombre que apareció de la nada diría golpeando al pelinegro.

-Rotación Celestial de los Ocho Trigramas (Hakkeshou Kaiten)-. Contraatacaría Hinata, alejando al enemigo.

Con unos pocos golpes el Uchiha se veía en muy mal estado, cosa que se terminaría de afirmar al verlo casi de rodilla.

-Esto es malo, bloqueo muchos de sus puntos de Chakra-. Analizaba la Hyuga con ayuda de sus ojos, los cuales le mostraban las áreas bloqueadas en el flujo de energía de su acompañante.

-Apenas puedo mantener el Sharingan, no soy capaz de cambiar al Mangekyo-. Razonaba el pelinegro quien respiraba muy agitado, notando su limitación actual.

Poniéndose enfrente de su socio, Hinata levantaría sus defensas protegiéndose a ella y su camarada al mismo tiempo.

-¿Por qué haces esto?, Hiashi-. Cuestionaba la Hyuga queriendo saber lo que tanto se preguntaba antes.

-La rama principal y secundaria, la división de nuestra familia, es el mínimo de sus problemas, desde hace ya tiempo no se ha visto un solo prodigio que nos eleve, no somos lo que éramos antes-. Contestaría, quien la pelinegra reconoció como Hisahi, el traidor que tanto buscaban.

Furia, era lo que se vería en la expresión de la heredera del clan Hyuga.

-No solo has matado a miembros de tu propia estirpe, has filtrado información, perjudicando a la familia y a la seguridad de la aldea, todo por reconocimiento, vivimos en paz, tus deseos no tienen sentidos-. Exclamaba Hinata mostrando su Byakugan listo para el combate.

-Princesa, incluso tú eres débil ante estos ojos que el perfeccionado-. Diría el traidor, siendo este quien comenzaría el enfrentamiento.

Los sonidos del estilo de los puños suaves y las enormes ráfagas de Chakra, muy visibles gracias a su visión especial, sorprendería al Uchiha que solo podía tratar de recomponerse.

-Es demasiado rápido-. Previa la Hyuga que si bien lograba bloquear golpes peligrosos, muchos otros si conectarían.

Una enorme fatiga se mostraría en la cara de la pelinegra.

-Mis pulmones, estar ardiendo-. Pensaba Hinata respirando con complicaciones.

-Me gustaría tener mi espada ahora mismo-. Razonaba el Uchiha que logro moverse abriendo una abertura de descanso para ambos competidores.

Nuevamente, la batalla había cambiado de participantes, siendo ahora Sasuke que se enfrentaba al Hyuga prodigio.

-¿Por qué haces esto?, no te incumbe-. Preguntaba Hiashi muy confundido del motivo que alguien fuera de su familia tendría para enfrentarle.

-Estás trayendo problemas a la aldea, pero sobre todo a Hinata, como heredera tiene que dar la cara por uno de sus miembros rebeldes-. Contestaría el pelinegro con rabia mientras se encontraba en el suelo sin muchas posibilidades de moverse, aunque lo intentara su cuerpo, no parecía responderle.

Si bien el estado de la Hyuga no tenía mejor aspecto que la de su compañero, aun así esta no dudaría en interponerse.

-Puedes huir y buscar ayuda, ¿por qué?-. Recalcaba Sasuke notando como ella ya tenía movilidad.

-Sé que estoy siendo egoísta, pero me encuentro aquí, por mi propia voluntad, ¡esta vez, te salvaré!, nunca pensé que la senda que llevaba estaba mal, ¡pero tú me mostraste el trayecto correcto, Sasuke!. No lo puedo explicar, quiero caminar juntos, estar contigo, tu personalidad completamente diferente me atrajo. Es por eso que no tengo miedo a morir protegiéndote, lo entiendo, yo te amo, Sasuke. Mencionaba Hinata que goteaba sangre de su nariz, seguramente por la dificultad de respirar.

Los ojos del Uchiha comenzarían a ser más brillante ante tal declaración.

-Entonces, deja que nuestros corazones y cuerpos se sincronicen-. Afirmaba el pelinegro levantándose con dificultad.

No era necesario hablar nada más, pues su forma de pelear en equipo que ambos mostrarían lo decía todo.

-Ella cubre en su totalidad los francos y él se ocupa de su punto siego, nunca había visto un trabajo en equipo tan perfecto-. Razonaba el traidor quien estaba en la defensiva.

La sonrisa que el duo mostraría al ver como los refuerzos por fin habían llegado.

-Todo termino-. Exclamaba Hinata teniendo rodeado a su enemigo.

-Tienes razón-. Afirmaba Hiashi utilizando un Kunai directamente en su vientre, terminando su vida en sus propias manos en pocos minutos.

Nadie haría nada, pues la tarea era el eliminar al renegado, cosa que no cambiaria porque el mismo lo hiciera, tanto la heredera del clan Hyuga como el menor de los Uchihas cayeran.

-Rápido, ninjas médicos-. Mencionaba uno de los muchos shinobis llamando la atención de los quienes curaban a los heridos.

Las miradas y manos del grupo se uniría antes de perder completamente la consciencia.

Sasuke en la dimension de Menma.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora