Un Donante por accidente [Offgun]

CAPITULO 29

                                    GUN

-Muchas gracias, Earth, lamento haberte
Ilamado a estas horas -dije en cuanto cruzaba el jardín delantero a zancadas.

Mi mejor amigo se apresuró para ayudarme el resto del camino hasta su auto.

-Gun, no te preocupes por eso mencionó
mientras me ayudaba a subir en el asiento del copiloto-. Aunque debo admitir que me
sorprendió tu llamada, te escuchabas muy
angustiado, ¿qué sucedió? El suave toque de earth sobre mi cabello me hizo sentir menos atormentado.

-off sufrió un accidente y está en el
hospital de Med, por favor, ¿puedes llevarme con él?

Earth asintió.

-Claro, yo te llevo, pero dime, ¿de qué tipo de
accidente estamos hablando?
Dejando en pausa su pregunta, se apresuró
hacia el otro extremo del vehículo. Subió junto a mí y se aseguró de colocarme el cinturón de seguridad antes de ponerse el suyo.

-Uno automovilístico -respondi con los ojos
húmedos por las lágrimas. Había estado
demasiado conmocionado como para llorar
antes, pero ahora que tenía a earth a mi lado, me permití sentir todas las emociones que revoloteaban en mi interior-. No me dieron los detalles por teléfono... así que no sé qué tanbmalo es. Al menos... parece que está consciente, lo que es una buena señal.

Earth condujo por el barrio residencial sin quitar la mirada del camino. Sabía muy bien que no podía esperar compasión para off de su parte. Ambos se detestaban y probablemente nunca llegarían a un acuerdo de armisticio.

-Tranquilo, seguro no fue nada grave -dijo
con tono apaciguador-. Sabes que él no me
agrada, pero tampoco le deseo ningún mal
porque sé que eso también te lastimaría.

Asentí, en cuanto miraba a través de la
ventanilla con mi corazón golpeando duro
contra mi pecho.

-Lo sé, y te agradezco el que hayas dejado de lado la opinión que tienes de off para
ayudarme.

-Es lo que hacen los amigos -se encogió de
hombros con una sonrisa sincera en su rostro

-. Siempre puedes contar conmigo.

Su compañía me sirvió de distracción hasta
que llegamos al hospital.

-iGUN!

Aquello fue lo primero que escuché de sus
labios cuando entré a la estéril habitación de hospital en la que lo tenían. Off se
encontraba sentado en la camilla con un
cabestrillo en su brazo izquierdo.

Su rostro sonriente se tornó serio cuando vio quien se encontraba a dos pasos de mí.

-off!-Solté junto con un suspiro de alivio

-.¡Santo cielo! ¡Me diste un susto de muerte!

-Lo siento -dijo sin quitar la mirada que
sostenía sobre mi hombro.

Earth aguardó en silencio detrás de mí, antes de decidir que su presencia no era requerida desde ahora.

-Gun -dijo mi mejor amigo en voz baja--.
Creo que ya es hora de que me vaya, solo
quería asegurarme de que llegaras sano y
salvo.

-Está bien, muchas gracias -mencioné
mientras tomaba su mano-. No sé cuánto
tiempo estaremos aquí, pero pediré un taxi.

-De acuerdo -dijo earth y me dio un beso en la mejilla antes de marcharse en silencio.

Me giré hacia off una vez más, tan solo
para toparme con su ceño fruncido.

-¿Por qué él vino contigo? -preguntó huraño
Creíae ustedes estaban neleados.

-Hablamos esta mañana, todo quedó resuelto entre nosotros -le dije de manera honesta.

Off asintio. Sus hombros se relajaron, y
dibujó una pequeña sonrisa ladina en su rostro.

-Él me odia.

-Sí, lo hace, pero no piensa sabotearte frente a mí nunca más.

Off bufó. Una expresión cínica en su rostro
me hizo gruñir disgustado.

¿El realmente iba a hacer una pequeña escenade celos en una situación como esta?

-Tal vez piense en eso otro día, por ahora
quiero regresar a casa -mencionó off con
una mueca-. El doctor me dijo que podían
darme el alta hoy mismo.

-¿Pero qué te sucedió? -acorté la distancia
entre ambos y acaricié su rostro con sumo
cuidado. En su sien tenía un parche que cubría una herida provocada por el accidente.

Recorrí el resto de su cuerpo con la mirada, y aquellos lugares donde esta era bloqueada por la bata de hospital, usé mis manos para asegurarme de que se encontraba bien.

Off me ofreció una hermosa sonrisa
conmovida.

-Estoy bien, cielo, pero alguien se ensañó
conmigo y me lanzó a un lado de la vía -hizo
un tonto puchero, el cual cubrí con mis labios. Él sonrió de vuelta-. Ya la policía hizo un reporte, pero lamentablemente no hay cámaras de seguridad. Además, no vi la placa de la camioneta que me
hizo esto.

Resoplé indignado con la idea de que alguien hiciera algo tan inconsciente contra el tonto padre de mi hijo.

-¿Qué clase de lunático haría algo así? ¿Lo
provocaste o algo así?

-No lo sé, y no, no hice nada que justificara lo que hizo. Ese vehículo apareció de la nada y comenzó a pitarme -se encogió de hombros.

Y en vista de que no tenía nada que ver
conmigo, el que quisiera rebasarme en una
avenida donde eso es prohibido, simplemente me lanzó a un lado de la carretera. No me preguntes porqué hizo eso, ya la policía va a investigar.

-Espero que encuentren al responsable, esto no se puede quedar así -negué de brazos cruzados.

Off asintió.

-Vamos a casa, no se supone que deberías
estar fuera de la cama a estas horas.

Él me abrazó con su brazo bueno, y depositó un beso sobre mi pancita.

Yo, por otra parte, no pude evitar estrellar mis labios contra los suyos, ya que me sentía tan aliviado de que se encontrara bien y a mi lado.