Lo último que vi fueron aquellos ojos verdes, me hacía recordar a las primeras esmeraldas que había hurtado cuando era pequeño, recuerdo que mi capitán estaba preocupado pero feliz a la vez, dio una caricia a mi cabello y continuamos cargando el barco que teníamos
No lograba ver nada, me sentía tan pesado que creía que sería mi fin, pero al parecer Davy jones decidió que era muy pronto aun para reunirme con mis colegas piratas fallecidos.
Mi mente se sentía pesada al igual que mis parpados, me sentía muy mal con la sensación de ser ahogado, sentía la intensa luz aun que al observar un poco más el entorno noté que estaba bajo la sombra de una palmera.
Estaba por dar una bocanada de aire, pero lo primero que salió de mi boca fue toda el agua que había tragado cuando caí al mar, me senté para empezar a recuperarme, jadeaba recuperando el aliento y también miraba a mi entorno.
A simple vista se veía como una isla, una clase de sabana y más adelante mío estaba mi barco, me levante y me acerque para poder verlo más de cerca y ahí pude notar como tenía agujeros demasiado grandes y como por dentro estaba totalmente empapado, incluso algunas algas estaban colgadas a él.
Decidí entrar por la ventana que estaba rota de el camarote, solté un resoplido molesto al ver como todas mis cosas estaban empapadas y la mayoría de mis papeles estaban destrozados y arrugados.
Sentarme en mi silla me resultaba deprimente, nada estaba bien, estaba varado y había perdido a mi tripulación, tantee mi escritorio en búsqueda de algo que hubiera sobrevivido hasta que toque aquella cajilla negra que guardaba mi bitácora y otras cosas importantes.
Rápidamente puse la clave de la caja y solté un suspiro aliviado cuando pude ver que el agua no había entrado a la cajilla y que la libreta, el tarro de tinta, la pluma, la brújula, 2 fotos y 2 pares de anillos se encontraban en buenas condiciones, tomé las fotos entre mis dedos y sentí mis ojos nublarse.
Recordarlos a ellos simplemente dolía.
Me negué a llorar, así que solamente saque la libreta y sus complementos para poder escribir, no creía que necesitara algo más por el momento, sacar mi ropa a secar podría ser en otro momento, me levante y deje la pequeña cajilla para comenzar a caminar hacia la cubierta del barco.
Pensé en los momentos antes del accidente, todos estábamos felices por volver a Francia, pero en un parpadear los perdí, sentí náuseas pensar que posiblemente no hubieran sobrevivido, pero una parte de mi decía que seguían bien y estaba por volver por donde entre, pero me detuve al escuchar una voz conocida
— Al parecer el pirata despertó, Leo es mejor volver a casa.
Asomé levemente la cabeza y ahí fue cuando supe de quien era esa voz, el tritón; habían vuelto junto a la pequeña niña sirena, pero me era increíble porque pensé que mi visión estaba fallando porque al parecían tener la capacidad de cambiar sus colas por unas piernas.
Vi a la niña escribiendo algo en la arena, pero no podía ver bien que era lo que estaba escribiendo y mi curiosidad hizo intentar mirar que era lo que estaba escribiendo, pero cuando me recargue lo que usaba como entrada provoco que una parte de la madera se rompió provocando que dos pares de ojos se posaran en mi dirección.
Ya no tenía sentido huir o hacerme el loco, así que enfrentaría todo como buen pirata y si algo malo pasaba, moriría con honor así que decidí salir del barco y ponerme en guardia, al menos intentar dar pelea.
— Quieto ahí tritón, más te vale no acercarte.
Joder
— Y si me acerco ¿Qué? ¿Acaso me mataras? — dijo mientras adoptaba una postura de superioridad cruzando sus brazos, maldito crio.
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Treasures Of The Sea - Fooligetta
FanfictionUn pirata buscando por todo el mar algo inusual que pueda ayudarlo a encontrar aquello que cree anhela tener: fama y gloria. Ser el primer Marino en encontrar a las tan buscadas "sirenas" las cuales solo se creen como un mito Claro, hasta que cierto...