Quedan las últimas dos horas de clase, dos últimas y eternas horas antes de verlo, y ya puedo oír su contagiosa risa, y ver sus alegres y brillantes ojos verdes sonriéndome, y sentir sus suaves manos abrazandome. Imagino cómo será volver a verlo, dónde iremos, de qué hablaremos, vorlver a encontrarnos y tener otra oportunidad de grabar desde su silueta hasta el tono de su voz en mi memoria. También recuerdo las otras veces que nos juntamos (me gusta recordar), las risas y sonrisas, las miradas, las sensaciones, lo que sentía cuando estaba con él, y sonrío, con cada cosa que recuerdo revivo ese sentimiento, es tan inexplicable pero tan maravilloso a la vez, te hace ver el mundo de colores, dado vuelta, con otros ojos, diferente, y todo se impregna con ese sentimiento, y me pregunto ¿acaso se impregna de ti? Me gustaría verte en todas partes y sentirte para siempre conmigo, pero como todo lo imaginario, y como las caminatas de la mañana, y todo lo hermoso, bello, maravilloso en este mundo, es efímero, esa opción se desvanece como la bruma; pero espera, quiero que sepas...
Y lentamente fue despertándose, perdiendo esa historia, ese sueño en el mar de la inconsciencia, cortando el hilo que la unía a ese viaje que es el dormir en el mundo consciente y despertar en el mundo de la imaginación, de las infinitas posibilidades, de lo irreal, de lo propio..., cortado por el ruido y la luz de la sala, que en un breve lapso de tiempo en su mundo mágico, se llenó y la devolvió a la realidad, y algo somnolienta y frustrada por haber perdido el hilo, saludó a sus amigas y se mentalizó para poder soportar el día. Y se preguntó: ¿podré recuperar ese hilo? ¿por qué los perderé?
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Al filo del fin
RandomEra temprano por la mañana. Ella se preparaba para ir al colegio, se vistió, tomó desayuno, se lavó, ordenó su mochila y, después de despedirse de su mamá, salió a esperar la micro. Era temprano por la mañana, aún estaba oscuro, la gente aún dormía...