Capítulo 41

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Esa mañana había sido un sufragio para Noah, ni siquiera se enteró como se levantó de la cama del departamento de Alek, o si siquiera desayunó o si la ropa que llevaba era la misma de día anterior. Sin embargo, se propuso seguir con el plan establecido.

Todos se pusieron de pie cuando la jueza llegó a la habitación y tras un discurso apegado al protocolo, del cual, Noah se perdió tras la sordera de su tristeza; finalmente se pudo proseguir con las testificaciones y pruebas por parte de los acusados.

—Dígame, ¿cómo ha sido siempre la relación del señor Nicholas Ivanov con su prometido, Noah Miller? —preguntó el abogado contrario a cada uno de los testigos que iban desde asistentes particulares de Nicholas, servidumbre del hogar y amigos íntimos.

—Nicholas siempre ha estado pendiente de su omega, podría decir que es su púnica prioridad.

—El señor Nicholas se mostró estresado y mortificado por la desapareció de su omega, sin duda hizo todo lo posible para encontrarlo, él esa verdadera víctima aquí.

—Como su asistente pudo comprobar que el señor Nicholas siempre estuvo presente en sus reuniones de encuentros prematrimonial, sin embargo, no podría decir lo mismo del omega, no creo que un hombre tan comprometido con su futuro matrimonio sea tan malvado como el omega que si tuvo el coraje de irse a meter a la cama de otro alfa.

Sí, todas esas respuestas eran mentiras, compradas y corruptas, pero en cuanto Noah miraba a los jurados y a la juez misma se veían convencidos, todos los ojos estaban sobre Noah, como i lo castigaran y discriminaran, todos los ojos apuntaban a que era el verdadero villano en la historia, todos, menos los de Demian, los cuales no habían volteado a ver al omega en todo el día.

—La corte llama a Demian Alexei Anderson Fossati para testificar a favor de Noah Miller—dictó la jueza haciendo que Demian se pusiera de pie rumbo al estrado.

—¿Qué está pasando? —preguntó Noah a Alek, muerto de los nervios por lo que fuera a pasar.

—No lo sé—contestó manteniéndose firme y analizando toda la situación—Posiblemente nada bueno, aún.

Noah comenzó a morderse sus uñas por la ansiedad, sentía unas ganas de vomitar terribles, lo último que quería era que Demian se diera por vencido con él y ayudara a ganar a Nicholas, se lo merecía por haberlo lastimado tanto, pero obviamente no iba a pasar, aunque para la mente atrofiada de Noah, todo apuntaba a que iba a morir en ese mismo momento.

—¿Jura decir la verdad y nada más que la verdad? —preguntó la secretaria de la corte haciendo que Demian posara su mano sobre una biblia.

—Lo juro—tomó asiento una ve retiró su mano del extenso libro.

—Señor—comenzó el abogado de Nicholas—¿Cómo conoció a Noah Miller?

—En un bar cercano a mi universidad—contestó con la verdad.

—¿Qué hacía en ese bar?

—Fui a beber un poco, necesitaba relajarme de mi estrés de la escuela—contestó con una voz ronca y con la vista de lado, como si recordara cada segundo de esa noche.

—¿Él se le insinuó? —preguntó casual, pero su tono de voz hizo irritar al alfa.

—No—contestó seco—Alguien adulteró su bebida y lo ayudé.

—¿De qué manera?

—Llevándolo a un lugar seguro...

—¿Qué tipo de 'lugar seguro'? —preguntó rápido sin permitir que Demian continuara hablando—¿Su cama?

Fire on fireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora