Capítulo 24

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—¿Es seguro? —preguntó Nicholas del otro lado de la habitación viendo como el doctor trataba a un Noah completamente drogado.

—No tiene por qué preocuparse, los omegas llegan a tener ataques de ansiedad por muchas cosas, también es posible que su celo se encuentre cerca—argumentó examinando los ojos marrones de Noah con una linterna—Dice que se van a casar ¿no es así?

—Si—contestó.

—Posiblemente esté agobiado por la boda, sí usted dice que normalmente es tranquilo podemos tomarlo como un episodio de estrés—argumentó guardando todo en su maletín—La droga que le di lo mantendrá tranquilo por cinco días, estará ligeramente ciego durante la fiesta, nada grave, sólo verá un poco borroso y sus piernas podrían llegar a fallar a medida que el efecto se pierde.

Nicholas estaba un poco incómodo, pero no le importaba si eso lograba conservar las apariencias y mantener a Noah tranquilo.

—¿Tiene efectos secundarios? —preguntó tomando el rostro pálido de omega, que no tenía expresión alguna.

—Podría tener un cambio hormonal e incitar el celo una vez la droga termine su efecto, pero nada grave siempre que se encuentre cerca de su pareja, lo mejor es que se mantenga tranquilo debido a las lesiones de su cuerpo—anunció retirándose de la casa.

Noah apenas y podía escuchar, se encontraba un limbo en donde no podía ver, escuchar o sentir lo que pasaba a su alrededor, sólo podía respirar y mostrarse sumiso ante el efecto de la droga. Nicholas no quería llegar a esos extremos, pero decidió hacer lo correcto para su familia, así mismo esperaba que con el paso del tiempo Noah también lo entendiera.

Una vez el doctor los abandonó volvió a acercarse al omega, sintiendo una enorme incomodidad por el estado inocente en el que estaba. Nicholas no comprendía los extremos que un omega lo hacía tomar solo por un simple episodio de estrés.

—¿Quieres un bocadillo? —preguntó para tratar de hacer sentir un poco más cómodo al rubio, pero solo recibió silencio, Noah ni siquiera lo escuchó, pero Nicholas sentía cierto remordimiento por lo que fue a la cocina por alguna fruta para poder darle.

Nicholas se quedó esa tarde trabajando desde su oficina. Supuso que parte del ataque había sido por no tener un alfa cerca, aunque esto era falso. Noah realmente había explotado en ira y se había querido desquitar con Nicholas sin ningún tipo de remordimiento.

Todo el día se la pasaron en silencio, el omega ni siquiera sintió cuando la noche arribó sobre la ciudad, se sentía como en un extraño sueño en donde flotaba con el sentimiento de que en algún momento caería al vacío y su cráneo se estamparía contra el suelo, tiñéndolo de un hermoso carmesí.

La droga lo había aislado de sus pensamientos, temores y preocupaciones, pero en cuanto el efecto terminara era inevitable volver a una pesadilla peor.

Nicholas estaba preparado para lo que vendría después de la fiesta, estaba listo para pasar el celo con Noah, finalmente cumpliría con su deber con su familia y haría suyo a ese omega. La promesa de un primogénito lo alegraba y llenaba de esperanza.

Y pese a todo, ninguno estaba listo para lo que sucedería.

─── ❝ Fire on fire ❞ ───

El día de la fiesta finalmente había llegado, Nicholas se había ocupado en la preparación de todo. Noah por su parte se había quedado en su cama, poco a poco había recuperado su vista, sin embargo, no llegaba a distinguir con claridad las figuras frente a él, no había querido bajar de la cama, supuso que si se amarraba a ella no podría ir al evento y nunca se haría público el compromiso con Nicholas, pero las cosas no eran tan sencillas.

Fire on fireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora