Capítulo XI

267 35 32
                                    

Después de aquel nuevo incidente en la cafetería, las cosas habían ido inesperadamente bien...

Al principio las cosas fueron algo incómodas para el grupo, pero teniendo en cuenta que Matthew todavía defendió a Ricky de una golpiza justo después de que ambos habían discutido, asumieron que todo fue una pelea impulsiva y que habían hecho las paces.

Decidieron no pensar demasiado en ello y pronto todo había vuelto a la normalidad.

Sin embargo, aunque todos ya habían olvidado el incidente, Hanbin estaba más alerta que nunca.

¡Era estresante cuando Ricky estaba planeando sus esquemas abiertamente, pero era incluso más estresante cuando no estaba haciendo nada!

Matthew le había pedido que por favor no intentase razonar o discutir con Ricky otra vez, por lo que Hanbin tuvo que acceder a regañadientes, aún así siguió vigilante durante varios días y solo se relajó después de que Ricky haya perdido muchas oportunidades para hacer alguno de sus comentarios pasivos-agresivos o actuar de forma hostil contra Matthew.

De hecho el rubio parecía estar ignorando al castaño tanto como le fuera posible.

Debido a que las cosas eran de esta forma, Hanbin finalmente pudo enfocarse en estudiar para los exámenes del primer semestre.

Aunque el grupo de amigos disfrutaba jugando y perdiendo el tiempo, en realidad eran buenos estudiantes y además alumnos de último año, por lo que tenían que dar todo de sí para obtener buenas calificaciones ya que durante el segundo semestre tendrían que prepararse para el ingreso a la universidad.

El grupo de amigos decidió reunirse todas las tardes para estudiar juntos, cosa que fue muy útil para aquellos a quienes se les dificultaba más entender algunos temas.

Esta tarde habían decidido estudiar en casa de Matthew.

La mamá de Hanbin le había pedido hacer unos recados después de la escuela, por lo que el pelinegro no regresó con Matthew de inmediato.

Los demás chicos, a excepción de Hao, también decidieron volver a sus respectivas casas para cambiarse de ropa y descansar un poco, luego se reunirían en casa de Matthew.

Hao le sacó la lengua infantilmente a Hanbin mientras entrelazaba su brazo con Matthew y ambos se marchaban juntos.

Hao había estado distraído echándole un vistazo a la habitación de Matthew, pues era la primera vez que el castaño lo invitaba a su casa.

Durante los días en que pasaron la mayor parte del tiempo juntos, había sido en casa de Hao. Por lo que estaba curioso.

—¿Quieres cambiarte? ¡Creo que la ropa de Hanbin podría quedarte!

Hao se contuvo de rodar los ojos hasta atrás de su cabeza. Todavía estaba disgustado ante el hecho de que tuvo que rendirse con su enamoramiento hacia Matthew, y que Hanbin aún seguía siendo un estúpido cobarde que no quería arriesgarse. Es decir, ¿De qué estaba asustado? ¿No era obvio que Matthew también sentía algo por él?

¡Por lo tanto, Hao todavía se sentía hostil con Hanbin y no quería ponerse su ropa!

Zhang Hao hizo un puchero y se giró hacia Matthew, que ahora había abierto las puertas de su closet.

—Las de este lado son de Hanbin, y las de este lado son las mías. Puedes elegir.

El más alto sintió un tic en la ceja cuando miró la ropa muy bien acomodada.

Se preguntó cuan a menudo Hanbin se quedaba en casa de Matthew para que incluso el closet del castaño estuviera ordenado de acuerdo a las pertenencias de cada uno como si fuesen compañeros de habitación. Además, antes cuando Hao fue a cepillarse los dientes, también vio que había dos de cada artículo de aseo personal en el baño de Matthew.

ANNOYED!! (MATTBIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora