ANNOYED: FINAL.

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El anhelo de Matthew hacia Hanbin era una emoción profunda e intensa que consumía cada uno de sus pensamientos y acciones todos los días.

Era un sentimiento que había crecido dentro de él sin que pudiera evitarlo, comenzó como una pequeña chispa y luego ardió hasta convertirse en un infierno en toda regla.

Cuando no estaba con Hanbin, el corazón de Matthew anhelaba su presencia.

Anhelaba el sonido de la risa de Hanbin, la calidez de su sonrisa y la tranquilidad de su voz.

Todas las noches, mientras Matthew yacía en la cama, se perdía en sus pensamientos sobre Hanbin.

Su mente repasaba los momentos compartidos durante el día, la forma en que los ojos de Hanbin se arrugaban cuando reía, el suave toque de su mano en la suya y la forma en que su presencia hacía que Matthew se sintiera seguro.

Hace algunos meses atrás, sentirse de esta forma hacia alguien habría sido imposible.

Matthew había pasado por demasiadas dificultades como para confiarle su corazón y sus pensamientos a otra persona que no fuese Taerae.

Había construido fuertes muros a su alrededor para evitar ser lastimado, pero Hanbin había derribado todos sus muros de forma natural, dejando a Matthew indefenso y anhelante.

El anhelo de Matthew no era sólo un deseo de cercanía física, sino también un hambre de conexión emocional.

Anhelaba la profundidad de sus conversaciones, la forma en que compartían sus miedos y sueños más profundos sin restricciones, y la comprensión que Hanbin le ofreció sin juzgarlo desde el primer día.

Era un anhelo que iba más allá de las palabras; Matthew quería ser quien hiciera sonreír a Hanbin, quien lo abrazara durante los momentos difíciles y quien compartiera su amor abiertamente y sin reservas.

Por otro lado, Hanbin también lo anhelaba.

Desde el momento en que se conocieron, Hanbin se sintió atraído por el espíritu fuerte pero herido de Matthew.

Debía reconocer que quizás estuvo enamorado de Matthew desde la primera vez que lo vio.

Se sintió encantado al ver más allá de la dura y hostil fachada inicial de Matthew,  y de su vulnerabilidad escondida debajo.

Fue una curiosidad que rápidamente se transformó en una conexión profunda.

Quería ser quien pudiera ayudar a Matthew a sanar, quien pudiera hacerlo sonreír y quien pudiera compartir su dolor y felicidad. Era un deseo desinteresado de ser la fuente de consuelo y apoyo que Matthew necesitaba.

A medida que los días se convirtieron en semanas, las semanas en meses y su amistad se profundizó, Hanbin reconoció que estaba enamorado de Matthew.

No era algo que hubiera planeado o esperado, pero era innegable. Le dolía el corazón cuando estaban separados y anhelaba estar al lado de Matthew en todo momento.

Reconocer sus propios sentimientos fue un proceso tumultuoso para Hanbin. Sintió celos y posesividad por primera vez, emociones que lo confundieron y asustaron.

No quería asustar a Matthew y le preocupaba que la intensidad de sus sentimientos fuera abrumadora para el ahora pelirosa.

Las secuelas de la pelea aquel día dejaron a Hanbin y Matthew en un estado de doloroso silencio.

Su amistad se había topado con un inesperado y doloroso malentendido, y con el arrepentimiento de las palabras dichas sin pensar.

Con la situación alcanzando este punto, incluso llegaron a pensar que nunca deberían haber confesado su amor al otro para empezar.

ANNOYED!! (MATTBIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora