Una latina en South Park || South Park x Tu

Cap 23

TN ya llevaba cinco días en su casa, encerrada, sola y aburrida, solo saliendo cuando sus padres le pedían que haga acto de presencia para alguna venta o propaganda.

Su mañana se resumía en ser obligada a ser una propaganda viviente para el negocio familiar, para sentarse a comer algo que su madre preparaba que solo a sus progenitores les gustaba, finalizando en hacerla lavar los platos y dejarla sola el resto del día para irse a trabajar y tratar de sacarle más dinero a la gente del pueblo.

La latina estaba en su cama, viendo la habitación como si fuera una habitación blanca de un hospital psiquiátrico, solitario y abrumador, viendo las horas pasar desde las once de la mañana hasta las siete de la tarde. Lo odiaba tanto. Toma su teléfono y mira los mensajes que le había mandado a sus amigos: Butters le preguntaba a diario como estaba y le mostraba algo que haya visto y le gustara. Anoche, incluso, le había pasado una foto de Mysterion sacada a escondidas diciendo que lo vio justo y recordó que a ella le gustaba, haciéndola sentir alegría, Kyle le contaba chismes de la escuela con el cuidado de no contar cosas vergonzosas para otros y, si lo hacía, evitaba decir nombres, mientras que Stan le pasaba todos los nombres que ella le pedía a cambio de dejarlo usar su chat como desahogo para mandar a la mierda a su padre hasta que sus compañeros de banda acepten hacer una canción, Cartman se quejaba de estupideces, le hablaba de gatos y mapaches, se negaba a volver a aprender a bailar porque estaba ocupado con otras cosas y, recientemente, le ofrecía gnomos, algo que ella aceptó con la condición de que él se los regale. Por último estaba el chat de Kenny, tan vacío como la última vez que habló con él, viendo las últimas imágenes que le había mandado el muchacho mientras estaba con el chico del Chuyo. Suspira, saliendo y entrando del chat viendo los "Buenos días", "¿Cómo estás?" y demás mensajes que le había mandado en los días esperando que él se digne en responder, realmente nada exagerado más que cuatro o cinco mensajes por día, en los cuales un día hasta le pidió que le pase porno, como Wendy dijo, para que él conteste algo.

Nada.

Era como si no existiera, como si solo se hubiese acordado de ella durante los primeros días, sentía que el chico ya no estaba interesado en ella.

No es como si le importara tener la atención del chico de la parka naranja, pero realmente la quería. Estaba ansiosa por poder conversar, aunque sea, unos minutos con Kenny y este le responda algo que le levante el humor como algo que la haga reír o un mensaje de ánimos, un emoji, cualquier cosa servía ahora mismo para ella. Su corazón latía con rapidez mientras se imaginaba al chico sonriendo, mandandole la foto de algún gato que entró a su casa o una selfie con todos los ratones mascota que tiene gracias al estado de pobreza en el que vive.

Cualquier cosa le servía, menos el visto que acababa de recibir. Sentía ganas de gritar, llorar, insultar, quería ir a buscar a Kenny y exigirle un porqué la ignoraba. No es como si ella lo molestara siempre, al contrario, normalmente ella solía mandar apenas uno o dos mensajes a todos para no ser una molestia pero estos días eran algo específico, algo distinto. Estaba aburrida, triste, sola y quería tener, al menos, contacto con sus amigos. Pero últimamente todos estaban ocupados, hasta Kyle quien aparentemente, por lo que decían las lenguas, se había conseguido un novio que le ocupaba gran parte del tiempo al tampoco estarse reuniendo con su grupo de amigos usual por, nuevamente, estar ocupados.

Todos tenían algo que hacer menos TN, que solo practicaba pasos de baile, cantaba o se acostaba en la cama a tomar cerveza, fumar marihuana y odiar con su alma su existencia.

Nisiquiera Chaos había ido esos días a verla.

Se levanta, suspirando, cansada de la situación en la que se encontraba y va al espejo para ver su estado, viendo las ojeras ya visibles por los vicios y el no haber dormido como corresponde. Sabía que tendría el sábado y domingo libres pero ella recién volvería a clases el lunes, intentando escapar del desgaste de sus padres, por lo que quería verse un poco mejor que eso para verse con las personas que quiere.