Lavender's Blue [Minsung]

El rey Minho

CAPÍTULO 4

Por el reino la noticia de la infiltración en el palacio comenzaba a esparcirse más rápido de lo esperado, la gente de todas las clases empezaba a hablar con recelo y alarma, ya no tenían miedo, pero fue inevitable pensar en la catástrofe que estaba por suceder. El primer ministro junto al ministro de defensa ya habían ideado un plan, por supuesto que él rey estaba al tanto, pero aun no era momento de operar.

—Entonces, ¿Qué tal está el hospital?—preguntó Lee Know a su amigo. Estaban en una casa un poco alejada de la ciudad, era pequeña y acogedora. El hogar perfecto para los esposos Seo, Changbin y Hyunjin.

—Terrible, las condiciones no son óptimas para atender los casos que se presentan allí—respondió Hyunjin mientras su esposo le hacía cariños en el cabello

—¿Levantaste un informe?—preguntó Changbin, mientras quitaba algunos mechones revueltos de la frente de su amado.

—Debe estar ya en la oficina del rey.

Lee know frunció el ceño, se acomodó en la silla y terminó de beber el poco de whiskey que quedaba en su vaso, la puerta se abrió dejando ver a un hombre alto, se quitó el gorro de plato dejándolo en el perchero y su saco adornado de miles de insignias. Mientras se acercaba a sus amigos pudo darse el lujo de cojear ante el dolor y lanzarse en el sillón cayendo casi muerto.

—Hola a tí también Bang_dijo el anfitrión de la casa. El nombrado gruñó y luego de tomar el 1% de su batería, se levantó hacía Lee.

—Necesito muchas respuestas Lee know, ¿Es él, el omega? ¿Ese es el cachorro? No pensé que fuera tan pequeño.

—Espera, ¿De que hablan?—Hyunjin se levantó exaltado del regazo de Changbin y vió al chico fijamente. Tal vez ser el único omega en el grupo le jugaba una desventaja al momento de enfrentarse al orgullo de un alfa.

—En la construcción del palacio conocí a un omega, es lindo, ya saben, su olor es muy agradable, además tiene un cachorro, Seungmin, acaba de cumplir seis meses. Desde que lo conocí, he estado más conectado con mi lobo, no lo sé, es muy extraño ese sentimiento que tengo, mi pecho se siente cálido y mi corazón late con fuerza, cuando estoy con el cachorro siento que debo cuidarlo, protegerlo, Jisung hizo que volviera a sentirme bien, tranquilo, a veces la realidad se vuelve confusa cuando estoy a su lado, hizo que mis instintos despertaran como nunca antes lo había hecho y yo...—. Se detuvo al darse cuenta de que había hablado de más. Todos en la sala rieron.

—Estás enamorado, querido amigo, justo así me siento cuando estoy con Jinnie—dijo Changbin dándole palmaditas en su hombro.

Jisung apenas había tenido tiempo de pensar en lo mucho que extrañaba a Lee Know los días se habían ido bastante rápido desde que este estuvo en su casa por última vez y le informó que no iría a la obra por un tiempo. Luego de despedirse de él e ir al centro le ocurrió algo muy curioso.

—Hyung, ¿Hoy no lo acompañó el chico bonito?—le preguntó uno de los pequeños que un día lo vio llegar con Lee Know.

—Mm no, tenía que trabajar, ¿Por qué pequeño?—. Le preguntó.

—Por que Junho dice que se parece al hombre de la foto en el periodico—habló esta vez una niña. Esta le pasó el periodico y justo después del encabezado "Peligro para la familia real" un hombre casi idéntico a Lee know posaba en una foto.

Leyó rápidamente el pie de imagen, allí aclaraba que se trataba del Rey Minho, único heredero de los difuntos reyes, coronado a los 18 años y quien había luchado por las tierras del país en la guerra de hace diez años.

Suspiró.

Era totalmente imposible, pero algo en su interior le daba el sentimiento de duda y traición.

No había momento en el que no pensara en cuanto le hacía falta, el alfa se convirtió en parte importante de su día a día, incluso Seungmin se había acostumbrado a despertar con él rodeando su cuerpo y dándole un besito de buenos días.

Una tarde estaba haciendo un pequeño trabajo, desde hace una semana habían salido algunas cláusulas que obligaban a los trabajadores a descansar dos veces por semana y tener más relevos, su jefe para evitar que la guardía se le viniera encima, cambió algunos puestos, al omega lo envió a transportar materiales hacia el interior del palacio. Tuvo la ventaja de que Seungmin estuvo dormido todo el día en su espalda.

Seguía el camino que un guardia le había indicado en el primer viaje, tenía reglas sencillas:

No ver a los ojos.

No tocar.

Y la más importante:

Evitar contacto visual con los altos cargos y sobre todo con el rey.

Nunca había sido de meterse en problemas, seguía al pie de la letra las indicaciones y así ganaba la confianza de muchas personas, tanto así que luego de haber terminado de llevar el material, estaba llevando tarros de pintura.

No eran tan necesarios, pero aun el turno de Jisung no acababa.

Iba por el camino indicado con la pintura en la mano, hacía unas horas que un saco de cemento le cayó encima y aún su cabello y ropa estaban cubiertas del polvo y eso hacía que su naricita pícara y estornudara de vez en cuando. Giró en la esquina escuchando voces y deteniéndose en seco, se pegó en la pared pensando que era algún sirviente del palacio y se mantuvo quieto hasta que sintió las voces demasiado cerca de él.

Algo en su interior se sintió nervioso, por alguna extraña razón las voces le parecían conocidas. Bajo la mirada inconsciente de sus acciones hasta que el potente aroma a café recién molido y madera fresca, lo inundó.

Conocía ese olor a la perfección, su Omega se había obsesionado tanto con él que cada mañana con su taza de café lo intentaba replicar y cuando pasaba por la fábrica de muebles de madera suspiraba profundo y mantenía el aroma en su nariz por un momento.

Pensó que era un juego de su mente y de su omega con el aroma de Lee know, pero era tan real y potente que no podía ser producto de su imaginación. Seungmin comenzó a removerse en su espalda, había empezado a sentir el aroma del Alfa, Jisung llevó sus manos hacia su espalda intentando calmar al niño que lloriqueaba. Levantó la vista guiándose por el aroma y sintiendo su corazón encogerse.

—Envíen una carta al gobernador del pueblo fronterizo del norte, debemos mantenerlo al tanto, pídele una audiencia con él de inmediato, también aumenten el control de las líneas límite, tenemos que encontrar al grupo lo antes posible y evitar nuevas tropas, me temo que hay infiltrados en ellas.

Las manos de Jisung temblaron, cuando las personas pasaron frente a su campo de visión sus ojos distinguieron la figura del hombre que se había robado su corazón. Frente a él, Lee know venía bien vestido con un pantalón de vestir negro y una camisa color crema arremangada hasta los codos exponiendo sus incontables cicatrices que Jisung ya habia detallado, su cabello ya no cubría su rostro y su postura era tan recta que se veía incluso más alto de lo que ya era.

—Lee know—escapó de sus labios en un tono casi inaudible. El chico venía liderando un grupo de otros dos hombres. Uno de ellos en traje y el otro era el General Bang. Sus pasos eran firmes y su caminar bastante dominante, parecía otra persona a simple vista, pero Jisung pudo confirmar, gracias a aquellos ojos verdes potentes que hicieron contacto con los suyos por unos segundos, que se trataba del chico del que se había enamorado, de Lee know, del rey Minho. Tuvo que mover sus brazos que sostenían al niño en su espalda, ya que el llanto de este se volvía más intenso.

La ligereza del aroma en el aire lo trajo de vuelta a la realidad, el grupo de personas ya estaba lo suficientemente lejos como para que él pudiera seguir su camino y concluir con su trabajo. Se sintió observado el resto del día, así como también el sentimiento de que algo iba mal que comenzó a sentir la noche anterior, se intensificó y lo dejó mareado un par de veces.