Mi pequeño Alfa

28) ¡Supe' que me he caido de la moto!

La canción Burn de Ellie Goulding sonaba a bajo volumen en la radio del auto.
Armando conducía, Emilio estaba de copiloto y en medio estaba juanjo.
Detrás estabamos Yun, Manolo y yo en medio.

Tenía demasiado sueño. Hoy habían pasado demasiadas cosas y el alcohol de antes me empezaba a dar efectos secundarios.
Hoy había sido duro así que simplemente cerré los ojos y apollé mi cabeza en el hombro de Yun.

(...)

¿Sabes cuando estas durmiendo pero solo está descansando tu cuerpo. Osea que eres conciente de lo que pasa a tu alrededor pero no puedes moverte?

Pues así estaba yo justo ahora.
Había sentido el auto parar y todos estaban bajando.
Emilio con cuidado me sacó del coche y pasó un brazo por debajo de mis rodillas y otro por alrededor de mis hombros.
Así me llevó adentro de su casa.

Mis ojos seguían cerrados pero podía oler perfectamente ese aroma picante a curry que provenía de el mexicano.
Noté como me dejó en el sofa. Yo solo me acomodé.
A: Ahún no me creo que nos hallamos puesto a darles una paliza a unos agentes- sonó la voz cansada de Armando.
E: wey, solo 1 era policía. Además que no estaban de servicio, era todo legal- se escusó Emilio que se habia sentado y había puesto mi cabeza encima de sus piernas.

Las cálidas caricias que dejaba en mi pelo solo lograban dormirme mas.
Y: el caso es que el enano eta' sano y salvo con nosotlos- La voz de Yun se escuchaba mas lejos. Tal vez estaba en la cocina.

Un ruidoso sonido de un teléfono me hizo levantarme. Muy a mi pesar me froté los ojos intentando despertarme un poco.
Al momento todos miraron a Manolo con cara de quererlo matar.
M: jeje perdón. Me llaman- se fué velozmente a su cuarto.
Yo me reincorporé y apollé mi cabeza en el hombro de Emilio.

A: Gus. Son las 3 de la madrugada. Tu y Yun iros ya a dormir. Juanjo ya lo ha hecho. Nosotros ahora iremos- asentí y me levanté del sofá.
Y: voy a dejalte un pijama, vente- me sonrió y ambos fuimos a su habitación.

(...)

El pijama que me dejó consistía en; una camisa blanca del Scobydoo, ancha que me llegaba por la cadera y un pantalón corto negro.

Salí del bañó y me encontré a yun vestido parecido a mí pero con un dibujo de Ramen y pantalón rojo.
Y: al fondo de' pasillo, al lado de la habitasión de Emilio y Manolo etá la de invitados. Buena' noches- se lanzó de plancha a su cama.

Yo reí y me fuí a donde me dijo. Al entrar a la habitación olía a limpio, estaba ordenada. Como si nadie la hubiera tocado hace mucho.
Me tapé con las mantas y me hice ovillo.
No quería mas pesadillas... no mas por hoy. Así que no dormiría.

Había pasado un rato, y yo estaba tan perdido en mi mente, dejando las lagrimas silenciosas recorer mis mejillas, que no me había dado cuenta que ya todos estaban dormidos.
Tenía mucho, mucho sueño. Pero si dormía acabaría peor.

Decidí levantarme y caminé en silencio hasta el cuarto de emilio.
El dormía placidamente, su pelo que le llegaba por los hombros se encontraba suelto. Dormía con el torso descubierto y unos pantalones grises de chándal.
Con cuidado me hacerqué y di golpecitos en el hombró.

Guñó un poco pero después habrió los ojo.
Al verme se reincorporó en la cama.
E: ¿jotito todo bien? Que pasa?- miró la hora y y eran las 3:31 am.
G: n-no puedo dormir solo... tengo pesadillas- admitir eso fué un golpe duro a mi orgullo. Pero total. He dormido 3 días con mi jefe. ¿Porqué no podré hacerlo con mi amigo?

Pareció pensarselo pero con una gran sonrisa se hizo a un lado y me dejó un espacio en su cama.
Le sonreí de vuelta y me tumbé con el.
Emilio instantaneamente cerró los ojos para dormirse, yo lo hice poco después, ahunque no se sentía igual que con Jack...