34) Amor ardiente

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Por fin habíamos llegado a casa.
Jack se dirigió a la cocina para echarle comida a Ivadog.
Yo subí a la habitación y me quité el disfraz para ponerme mi pijama de manga corta.

Bajé y mientras Conway se iba a duchar yo me senté en el césped del jardín.
La fría brisa me acariciaba y el sonido de los grillos me acompañaba en la oscura noche estrellada.

No se cuanto rato estuve así pero un cuerpo grande se sentó detrás mío y me pasó un brazo por la cintura para pegarme mas a el.
Ya sabia que era Jack. Su cuerpo emanaba calor haciendo que quisiera hacercarme mas a él.
J: muñeca hace frío ¿porque no entras en casa?- su voz era suave al igual que sus caricias en mi vientre.

G: el aire frío refresca la mente- yo seguía imnotizado con las estrellas.
J: ¿y que es lo que pasa en ese celebrito tuyo?- me giré para verlo a los ojos preguntándome si decírselo o no.
G: Jack... ¿tú... tu me amas?- mi pregunta le cayó por sorpresa por su reacción pero al instante me regalo una hermosa sonrisa.

J: por supuesto que te amo Gustabo, en tan solo unas semanas as revolucionado mi vida y con el paso del tiempo has entrado tan profundamente en mi corazón que ahora solo pienso en ti.
Me has enamorado con tus bromas y tu carácter. Y me gustaría decirte algo... Quiero estar contigo toda la vida. No quiero que seas mío. Quiero que seas libre, tuyo, y que aún así decididas que quieres estar conmigo-

Sus palabras me dejaron sorprendido, tanto que no supe que responder.
J: Gustabo ¿te gustaría ser mi pareja de vida? Mi compañero y compartir mas que un lazo?- su mirada se había iluminado y ahora su mano acariciaba mi mejilla.
G: ¿d-de verdad quieres que sea tú pareja y tu compañero?- estaba en shock.

J: sí, me gustaría que tuviéramos algo formal y poder vivir lo que me queda de vida contigo. Pero antes quiero que sepas que si vamos a ser pareja, vas a ser el punto de mira de todas las mafias, que van a intentar hacerte daño porque sabrán que eres lo que mas amo- ¿como le diigo que me daba igual todo lo que pudieran hacerme si podía estar con el, el hombre que amo?

No pude evitar sonreírle y me lancé encima suyo y le empecé a dar besos por toda la cara.
G: ¡Porsupuesto que quiero ser tu pareja Jack!- y unimos nuestros labios en un hermoso beso.
Cuando nos separamos me di cuenta que el no llevaba pijama. Sino ropa de ir a trabajar.

G: ¿a donde vas a estas horas?- le pregunté.
J: voy a echar un vistazo a comisaría para verificar que todo está bien y volveré cuando menos te lo esperes- le sonreí y ambos nos levantamos.
G: cuidado que no te coman los monstruos- reí mientras me despedía de el cuando desapareció cerrando la puerta.

No podía creerlo, el día que mas odiaba del año había sido el día que me había puesto de pareja con Jack Conway.
¿Como podía decírselo a la mafia?
Ellos son mis amigos, pero no se si querrán matarme... he de pensarlo bien.

Estaba tranquilamente en la cama tumbado con el móvil junto a ivadog

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Estaba tranquilamente en la cama tumbado con el móvil junto a ivadog.
El perro repentinamente se levantó y se quedó mirando hacia la puerta cómo si estuviera alerta.
Y de golpe empezó a ladrar mientras me miraba.

Mi pequeño AlfaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora