My Girls

Cap. L IV

Cap. 54

La situación en casa de Lucia se había tornado un poco extrema, un hombre herido tiende a tomar las peores decisiones. Roberto le había dicho a su hijo que su madre tendría otra relación.

- Ven Michell, vamos a comprar un helado. Dijo Mariana

- Deja a mi hijo. Yo me los llevaré hoy mismo. Eres una maldita perra.

- Papá no digas eso. Decía gritando Ángel

- Sabes que Roberto te cuento diez y dejas todo lo que estás haciendo. Esta vez dijo Juliana quien llegó junto a Valentina y Lauren. Juliana siempre que sus primas o sobrinas la necesitaran allí iba a estar, para cuidarlas.

- No me iré. Estos son mis hijos y Deborah debe volver a mi casa. Ha, pero ella anda exhibiéndose en la calle con mi jefe. Eres una sucia. Expresó molesto Roberto mirando a Deborah

- Ya basta o te partiré la cara. Dijo Juliana, Roberto volteó y miró a Juliana al ver que no estaba bromeando porque ya la conocían. Dejo la ropa de los niños que tenía en sus manos y la echó al piso.

- No me quedaré quieto. No te daré el divorcio. No te dejaré en manos de Andrés. Eres mía. Dijo Roberto

Cuando intento salir el hijo mayor le detuvo para abrazarle y él ahogado en su enojo, molestó por las decisiones que había tomado el abrazo de su hijo fue insignificante al punto que lo empujó, para terminar de salir de la casa. El pequeño cayó en el piso sentado. Y su madre corrió a él.

- ¿Estás bien? Preguntó su mamá quien lo levantó y lo abrazó.

- Mi papá no me quiere. Dijo el pequeño

- Yo te amo muchísimo y... A Deborah se le cerró la garganta y no tenía palabras para decir algo bueno que le haga pensar a su hijo que tiene un buen padre.

- Mami, vamos a casa, tengo miedo. Dijo Ángel

- Yo me quiero ir mamá. Esta vez era Sofía

- Ven mi amor. Dijo Deborah tomando en sus brazos a la pequeña y abrazando a sus tres hijos. Miró a su madre - ¿Este es el buen hombre que quieres para mí? ¿Sigues pensando que es lo mejor para mis hijos? Lucia no tenía palabras para comentar algo con todo lo que le tocó ver y ver a su hija y nietos destrozados.

- Lo siento hija. Fue lo único que pudo expresar Lucia. Deborah tomo a su pequeña la abrazo fuertemente. Lauren a Michell y Valentina tenía la mano de Juliana quien tenía las intenciones de golpear a Roberto.

- Ya nos vamos al departamento. Dijo Deborah calmando a su pequeña. En eso fue interrumpida por Valentina

- Vamos a desayunar al rico, lo que mis sobrinos quieran. Buscamos a Santi y así están todos. Expresó Valentina

- Mami yo tengo hambre. Dijo Ángel limpiando sus lágrimas

- ¿Tienes hambre Sofí? Le dijo Deborah a la pequeña quien respondió con un además bastante acertado.

- ¿Y tú príncipe? Le preguntó Valentina a Michell

- Si tía. Respondió el pequeño rebelde un tanto triste

Se había presentado la guerra Roberto tendría la pelea por parte de su ex mujer. Ella estaba dispuesta a pelear por sus hijos, porque ellos eran lo más importante que tenía.

Un día bastante fuerte para los pequeños quienes ya estando en su nueva casa y haber desayunado, estar con las tías y su primo Santi. Las cosas estabas más tranquilas, pero no tanto para Michell, quien no podía sacarse de su cabeza que su mamá tenía un novio.