Adhara. (+18) (Terminada)

capítulo 9

¡Corre rara!.

Adhara•

-Buenos días.-dije mientras ingresaba al instituto.

-Buenos días señorita Rymer.-saludó la maestra de ciencias.

Caminé por los pasillos con una sonrisa hasta que me detuve en mi casillero para sacar el primer libro cuando ví una figura que iba a nuestro salón, saqué rápido todo y cerré mi casillero antes de ir también al aula y encontrarlo en la puerta.

-Ramiro.-lo llamé y él me miró con cara de sueño todavía.

-Hola Adhara.

-Hola.-dije apenada.-Veras, quería disculparme por lo que pasó ayer, tú no tenías porque aguantar las idioteces de Efraín y...

-No te preocupes.-dijo cortándome.-Me conformo con que no vuelvas con ese imbécil de porquería.

-No quiero volver con él.-dije firme.-No volvería con ese, jamás.

Él asintió y sonrió.

-Me parece bien.

Saqué una paleta de mora de mi maleta y se lo ofrecí.

-Por los daños.

-No hubo daños.-rió.

-Bueno entonces por no decirle a Artem.

Su sonrisa se borró y se rasco la nuca.

-De hecho, se lo dije ayer de noche....-se quedó callado cuando Lia entró y me abrazó.

-¡Hey!.-le dije a mi amiga.-¿Que paso?.

-Me voy por un mes a Japón.

Abrí tanto los ojos que temí que se me salieran.

-¿Que?.

-Mamá no tiene con quien dejarme y...-seguia con su cabeza escondida en mi cuello y pensé que estaba llorando.

-¿Podrías quedarte en la mía?.-sugerí.

Ella negó.

-Sabes que a mamá no le gusta pedir favores.

Seguía en la misma posición y yo suspiré. La tristeza me invadió cuando ella se aferró a mí.

-¿Lia?. ¿Estás llorando?.

No contestó.

-Lia.

Ella se apartó.

-Claro que no, me voy por un mes de este encierro pero no quiero dejarte sola, ven conmigo.-dijo tranquila.

Hice una mueca y Ramiro la miró con el ceño fruncido.

-Sabes que no puedo ir, comienzo las prácticas, pronto.

-Las dejo solas.-habló Ramiro y se alejó de nosotras.-Gracias Adhara.-mostro la paleta.

-De nada.

-Cierto.-dice Lia mientras vamos a nuestros asientos.-Que mal, te traeré algo.

-¿Cuando te vas?.-pregunté con tristeza.

-Esta tarde, mamá viene a hablar en la hora de receso.

-Te voy a extrañar.

-Tienes que hacer que te devuelvan el móvil.-ordenó.-Asi no nos extrañamos tanto.

Asentí.

-En una semana me tendrás mandándote mensajes como una loca.

Chocó su hombro con el mío.

-Esa es mi chica guapa e inteligente.

^-^