CAPITULO IV

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CAPITULO IV


 


He encontrado un rayo de sol colándose atraves de la línea que deja mi cortina azul descubierta sobre mi ventana, es hermoso sentir que abres los ojos y todo te sonríe... sientes que será un buen dia y te alimentas el alma de nobleza y fe. Es la primera vez en un mes que no tengo pesadillas, descance a plenitud y sin miedo. Aunque eso me trajo dudas, ¿Qué abra pasado con él? ¿Ya no vive en mis sueños? .


A mi mente llega aquella llamada que recibi mientras dormia y tomo mi celular... -Es un numero desconocido, quizás era andres debio notar que le llame. Mi amiga golpea mi puerta y se adentra en mi cuarto con una energía que solo una taza de café proporciona.


-Buen Dia cenicienta, vamos es hora de empezar el dia –desvaneciendo la atención que recibia mi celular y centrándome en su maligna cara de boba, respiro profundo y me paro de la cama.


-Dame unos minutos y me preparo.


Hoy es dia de belleza, ya que al fin me convencio de ir a la dichosa fiesta y me han mimado tanto creo que debo acceder, asi que me bañe, desayune y me aliste de gancho a mi fiel regañona reguerosa mejor amiga para arreglarnos el cabello, depilarnos, quizás por un masaje y mas tarde unos tragos para terminar de liberarnos.


-Les, ¿y esta noche crees que podamos conocer a tu romeo? –Creo que es el mejor momento para entrar en el tema. Nos están haciendo las uñas y estamos relajadas sin interrupciones.


-no lo se, él es alguien muy ocupado sabes.


Su actitud no es muy convincente- ¿Y donde le conociste? –no la quiero forzar pero necesito indicios.


-Nos conocimos en un café; sabes tu galan se volverá loco al verte en ese vestido tan bello.


-¿Y cuál es su nombre? Nunca nos has dicho –Trata de evadirme pero insistiré un poco mas, esta finjiendo que no le molesta la conversación ojeando una revista y nisiquiera ha levantado la vista- si, espero que le guste es bastante corto y ajustado.


-Ahh es que nunca me preguntaron, se llama Alex. Disculpa, voy al baño.


¿En serio? Alex, bien puede ser hombre o mujer... asi que eso no me dice nada, porque no lo confieza de una vez. Mejor  la dejo en paz, la estoy acorralando y no quiero que se moleste.


Es sorprendente lo fugaz que ha hido el dia, pareciere que solo tuviera doce horas, el sin numero de actividades que hemos realizado también ayudo un poco con el tiempo. Llegamos a casa mas feas de lo que salimos, con el cabello recogido, las uñas mojadas, crema en las caras y caminando estilo pato por las uñas.


-Estoy agotada, descanzare un rato y luego nos arreglamos.


-De acuerdo no quiero que te sientas mal durante la fiesta, ya hable con Evon y estará aquí a las 11:00 p.m.


PEQUEÑA SAPA    Lis TejadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora