CAP. 2

2.9K 271 20
                                    


Maratón 1/5


🐰

Estaba posicionado detrás de Jimin cuando desperté a su lado. Lo tenía rodeado con mis brazos y pegado a mi pecho deleitándome con el olor que desprendía su cabello.

Jimin se había convertido en la criatura más sexi que habían visto mis ojos; con un cuerpo encantador y sumamente atractivo. Se que no debería pensar así, pero realmente era hermoso y Dios, como evitar pensar así, como tener presente lo que dijo mi padre y madre sobre Jimin: "Hey, este es tu hermano, ahora tienes que cuidarlo" entonces tratas de pisar tierra y te das cuenta que tu hermano es la cosita más provocativa que siempre deseaste; que ese pequeño niño que en ocasiones lo había visto por videollamada ahora no es el mismo que tienes en frente, pues bien, es difícil, es muy difícil y justo ahora mis manos pican por tocar y sé que no debería hacerlo, va a ser difícil contenerme cuando a esta edad en lo único que piensas es en sexo y en follar, y Jimin no es alguien con quien pueda pensar para coger. Él es mi hermano.

Tiré de las sábanas lentamente hasta descubrirlo y lo observé al detalle, por fortuna no se despertó, pero ¡mi Dios! Tenía puesto un camisón blanco muy traslúcido que le cubría ligeramente los muslos pues me dejaba ver una diminuta trusa blanca. Entonces comencé a agitarme y a sentir que me faltaba el aire, aun así, mis ojos siguieron su recorrido en todo su blanquecino cuerpo. Jamás había visto un culo tan apetecible como ese, su pequeña cintura, sus provocativas caderas eran lo más caliente que había visto en mi vida, y sus muslos ¡mierda! tan firmes, al igual que sus piernas... físicamente Jimin se cargaba el cuerpo que yo siempre quise poseer.

Inmediatamente después lo tapé y calmé mi respiración. Con mucho cuidado me acerqué nuevamente a su cuerpo para abrazarlo sobre las sábanas y él se removió, le di un beso en su mejilla y aspiré su aroma, me sentí muy cómodo a su lado y me mantuve junto a él, no pasó mucho tiempo cuando alguien abrió la puerta de la habitación, era mi madre, no la sentí llegar, estaba tan concentrado en Jimin que no noté que ella llegaba del hospital en donde trabaja, me vio abrazado a Jimin y le hice un gesto con el dedo índice en mis labios "sshhhh no hagas ruido" gesticulé y sonreí por el atrevimiento

- ¿Qué haces aquí Jungkook? - dijo ella en un tono alto y enfurecido que hizo despertar a Jimin de un sentón, tuve que soltar su estrecha cintura con mucho disgusto, sin embargo, ahora que estaba sentado tenía una perfecta vista de su espalda, por lo que me quedé sin palabras y no pude contestarle debido a la provocativa imagen que veían mis ojos

- Buenos días mamá - soltó Jimin algo adormilado frotando sus ojos.

- Buenos días cielo.

Me causó gracia tanta ternura, que me senté a su lado para darle un beso en la mejilla, algo torpe quizás y no me importó que estuviera mamá, sin embargo, a ella no pareció gustarle, porque se acercó a mí y de un jalón de orejas me bajó de la cama, me quejé del dolor cuando me soltó y luego me hizo la misma pregunta:

- ¿Qué estás haciendo aquí Jungkook?

- Quise dormir con mi hermano - le contesté - A él no le molestó si es eso lo que te preocupa - le respondí aun sobando mi oreja

- Anda ve a tu cuarto ahora y alístense para el desayuno los dos - salió del cuarto dejando la puerta abierta y me senté en el colchón a los pies de la cama mientras me seguía sobando la oreja.

Jimin se levantó y se puso frente a mí:

- Será mejor que te vayas Jungkook

No pude evitar mirar su pequeño y frágil cuerpo cerca al mío, sus perfectos pezones se podían ver gracias al camisón que apenas cubría su intimidad.

YO TE ENSEÑO (kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora