Después de lo que ví no quería salir a la calle, no quería desaparecer del mapa, además tenia mucho miedo de volver al instituto, por lo visto ya tengo 14 años, hago tercero de la ESO y estoy completamente sola, los de el hospital llamaron a adopción, para que no estuviera sola, y después de un buen rato me viene una enfermera, y me dicen que alguien me queria adoptar pero que aun así tenia que estar 1 semana más ingresada.
~•~
Ya era de tarde, entonces me lavaron y poco después llegaron dos personas que se parecían mucho a mis padres de cuando estaba en coma.
*Hola, como te llamas linda?
-No lo sé.
*Dejen la, todavía no está recuperada del todo -dijo la enfermera-.
-No mientan -dije molesta-.
*No se preocupen nosotros la querrémos igualmente.
*Ok, me voy -dijo la enfermera.
-Que quieren pelmas.
*Una sirvienta. Se ve que eres la más barata por tener daño en la cabeza.
-Imbeciles -dije susurrando-
*Que dijiste?!
-Nada que te importe.
El hombre se fue, y la mujer me empezó a pegar con mucha fuerza, dolía, dolía mucho, pero no pensaba expresar mi dolor para que ella estuviera feliz. Me dejó de pegar unos segundos.
*No te duele?
-No me hables, me dan ganas de vomitar.
Entonces vio como sacó la venda de mi cabeza y sacó una navaja, por unos momentos me alegré, por fin saldria de es tortura llamada "vida". Entonces la puerta se abrió.
*Bueno Raquel, te tocará hacer algunos ejercicios mentales -dijo la enfermera-.
*Ah, hola! -dijo la mujer-.
*Que hacer Raquel sin la venda? Y que hace usted con una navaja en la mano? -preguntó preocupada la enfermera-.
*Le cuento, Raquel piensa que ya está bien, y se a quitado la venda de la cabeza y se iba a bajar de la cama, cuando justamente veo esta navaja en el suelo, y la he recogido para que Raquel no se hiciera daño.
*Raquel, es eso cierto? -me preguntó la enfermera-.
La mujer me echó una mirada fulminante, y por desgracia entendí lo que me quería decir.
-Supongo -dije cortante-.
*Ok, lo informare a otras enfermeras, y por favor no lo vuelbas a hacer, estas demasiado grave, y prepara te para tu ejercicios -dijo la enfermera. Ah, y usted vayase se ha acabado el tiempo de visita -dijo fríamente-.
Esa señora se fue.
-Muchas gracias -le dije a la enfermera casi llorando-.
*Descansa, más tarde haremos los ejercicios.
Me puse a dormir tal y como dijo, pero poco después noté una presencia a mi lado, me giré y...
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Quien es esa presencia? Lo sabremos dentro de un siglo, por que? OS preguntaréis, por el simple echo de que me gusta dejar el final en suspense y tengáis muchas ganas de matarme. Muahaha.¡Muchas graciaaas y adiooos!
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Bullying
RandomUna chica que da su vida. Un chica que quiere... bueeeh, no hago SPOILER, mejor leed. Es una historia con esos finales que deseas matar a la escritora, incluso hay veces en que me mataría a mi misma por la forma de acabar de escribir un capitulo. Es...