Bullying

Hermanas?

No se si podía colar a Berónica en las clases. Pensé y pensé y me dí cuenta que si hacía una firma falsa podía entrar.

Mientras elavoraba mi plan Berónica se despertó -como sonámbula-.

*A donde vas? -le pregunté-.

Me miró indiferente.

*Espera que te acompaño. -le dije con un tono firme, no quería que la descubriesen-.

Me volbió a mirar, pero esta vez me miró con cara de asco. Metió la mano entre las sabanas y sacó una cuerda y ya me miraba de una forma un tanto siniestra.

-Vete de MI casa. -dijo firme-.

*Es nuestra casa, no te olvides. Yo te acogí, nadie más.

Le empezó a caer una lágrima por la cara pero aún así me miraba furiosa, se podía ver que quemaba odio en sus ojos.

Entonces se me acercó tan lentamente y furiosa que daba miedo. MUCHO miedo.

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Holaaaa mis caramelos pegajosos.

Un poco corto el capítulo de hoy, no? Todo es culpa de la escritora que está suempre con sus memeces. Ups!

En fín, fueron no se cuantas semanas sin escribir -a mí me parecen años :P-.

Muchas graciaaas y adiooos!