La parte más dura

52 5 2
                                    

Salí del hospital. Y fui a un centro adoptivo (claramente porque  me obligaron).

~•~

Me hicieron muchas entrevistas. Pero estaba demasiado triste como para ilusionarme de que alguien me adoptaran. Las lágrimas ya caían, entonces una enfermera que estaba encargada de que me adoptaran, se dio cuenta de mi tristeza y pidió que se siguiera en otro momento.

~•~

Después de tanto llorar me fui a una de las camas que había en ese centro adoptivo. Me acosté, quería dejar de pensar en estupideces.

No pude dormir por mucho tiempo, me levanté ya cansada de mi insomnio. Y fui a las habitaciones de otros niños que tenían la pequeña esperanza de ser adoptados. Parecía un fantasma, daba vueltas. Nada más.

Pero de pronto oí una voz un poco ronca, me dio miedo el acercarme, pero si no lo hacía las cosas podían empeorar, y no quería eso. Me acerqué, lentamente, sin presión.

*¡Rápido! -me gritó-.

Entonces fui corriendo. Fui tan rápida como mi mente enviaba esa información a mis piernas. Diría que incluso empecé a correr por el miedo. Y en pocos segundos estaba allí, para en medio de la oscuridad.

-Estoy... aquí... -dije a punto de llorar-.

*Ya era hora -dijo firme y seguro-.

En ese instante pude identificar su voz, pero en verdad no me lo creía. Era ese hombre, el hombre que se parecía tanto a Dan.

-¿Como te llamas? -pregunté un poco cansada-?

*Me llamo Daniel y soy el hijo de Anaïs y Brandon. Tus futuros padres.

-¡No! -grité ya llorando desesperada-.

Me fui corriendo de su lado, tenía miedo, mucho miedo. Como a futuros padres tendría a unos maltratadores, y como a futuro hermano a un asesino. Entonces, ¿que iba a ser yo?

¿Una chica loca con muchos problemas en la cabeza? O, ¿una vieja sola y traumatizada por su pasado?

....................................................................................................

Esta historia la estaba escribiendo en el bus mientras íbamos a PortaVentura, para no dejarles sin ningún capítulo.

¡Muchas graciaaas y adiooos!

BullyingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora