La ultima guerra

Capitulo 22

Despierto sudando y con los ojos muy abiertos, después de lo que paso no me gustaría volver a dormir.

Sentí como si todo lo que paso -la pelea con Sergio y tratar de escapar del escondite- fuera un sueño.

Al ver de nuevo la celda y la reja que nos separa de un pasillo que nos lleva al exterior me doy cuenta que todo fue real.

Christina esta a mi derecha dormida, esta recostada en la pared porque Juliana ocupa la cama que tenemos. Mark esta en la esquina con la cabeza entre las rodillas, no se si esta dormido o despierto pero no tengo ánimos de averiguarlo.

Esta muy obscuro, las lámparas que alumbraban las celdas y el pasillo están apagadas y eso me dificulta ver lo que están haciendo mis amigos de la otra celda.

Intento levantarme pero mi cuerpo me lo impide, aunque no haya recibido ningún impacto de una arma el dolor que me proporcionó los golpes de Sergio son insoportables.

Cada vez estamos mas lejos de encontrar a Taylor, no se si esta viva o si la SP la torturo para sacar alguna información importante para ellos y luego la hallan matado.

Mi cabeza piensa en muchas cosas y me da dolor de cabeza, pienso en que mi vida era perfecta antes de esta guerra, acabando la preparatoria para entrar a la universidad con la carrera que estudiaría ya decidida, un grupo de amigos con los que podía confiar y una familia...

Recuerdo de Scott:

-¡Hijo!- me grita mi madre -apúrate que tenemos que salir.

-Ya voy mamá- le contesto mientras me acomodo la corbata que me obligó a usar.

Me estoy arreglando para ir a la graduación de mi primo Alexander, hoy acabo su preparatoria y su escuela organiza una fiesta en grande, invito a mis padres a la fiesta y yo tengo que ir, un niño de ocho años en una fiesta de adolescentes.

Nunca me he llevado bien con el, desde que paso el accidente de mi hermano no nos hemos dirigido la palabra. En cambio su hermana Lydia es todo lo contrario -es un año mayor que el- me habla todos los días para saber como estoy y todos los sábados me visita.

Bajo los escalones de mi casa de dos en dos, cada vez que hago esto me tropiezo en el ultimo escalón. Al llegar a la puerta veo a mi madre con un vestido largo de color morado y a mi padre con un traje azul rey.

-Mira que lindo se ve- le dice mi mamá a mi papá.

-Ya es todo un hombre- le contesta mi papá y los dos se ponen a reír.

-A mi no me gusta, esta corbata es muy incomoda, siento que me esta ahorcando.

-Tranquilo Scott, en una hora te la podrás quitar- me dice mi padre en el oído para que no escuche mi mamá -siempre sientes eso cuando te pones tu primera corbata.

-Bueno chicos es hora de irnos, no quiero llegar tarde.

Los tres subimos al carro y nos ponemos en marcha hacia el salón donde sera la graduación. Veo por la ventanilla trasera como nos vamos alejando de nuestra casa; la casa es de dos pisos pero la siento pequeña, me gustaba mas la otra casa pero desde el accidente de mi hermano no nos gustaba estar ahí recordando...

Todo en el camino va bien hasta que entramos en un terrible embotellamiento, llevamos veinte minutos en un pequeño tramo de la avenida.

-Maldita sea- dice mi mamá -cariño crees que podamos tomar un atajo, ya estamos cortos de tiempo.

-Lo intentare amor, no tengo mucha ganas de conducir en estas calles.

Mi papá gira a la derecha hacia una calle completamente obscura, recargo mi cabeza en la ventana y cierro los ojos. La imagen de mi hermano aparece en mi cabeza y no tengo otra opción mas que abrir los ojos.

El carro ha parado en medio de la calle pero no veo ninguna señal de que aquí hay una fiesta, ha empezado a llover y empieza a surgir un ambiente de terror.

Mi padres han bajado del carro y están enfrente hablando -o discutiendo por los movimientos de mi padre- con una persona que tiene una capucha blanca que me dificulta verle la cara.

El hombre saca algo de la bolsa de su chamarra y se escucha el sonido de pistola.

Salgo del carro pero un hombre me carga y me tira al suelo, lo último que hace es darme un golpe en la cabeza.

Fin del recuerdo

Me incorporo a la realidad en cuestión de segundos.

-Miren quien despertó- dice Mark -Scott te damos el premio al mejor dormilón del grupo.

-¿Que hora es?- pregunto.

-Medio día Scott- volteo a ver quien me contesto y me llevo una gran sorpresa. Era Jack.

-¿Que haces aquí?- me levanta los ánimos verlo ayudándonos.

-Nos va a ayudar- dice Esteban antes de que Jack abra la boca -tenemos una ultima oportunidad para escapar.

-Pero tu no puedes ayudar Scotty- dice Louis, cuando me dice Scotty significa que me va a decir algo malo.

-¿Por qué no?- exploto del enojo.

-Scott estas muy herido- interviene Christina -tuve que darte tres pastillas para que despertaras. Tienes una sobredosis.

-Pero si desperté- digo -creo que era de noche porque todos estaban dormidos.

-Con mayor razón- dice Esteban -esas pastillas son muy fuertes. Te vamos a tener que vigilar.

Mark:
Después de que Zed matara a Trent nos regresaron a la celda a Scott y a mi. Pasaron horas y Scott no despertaba y eso nos empezó a preocupar, Christina tuvo que darle lo triple de la dosis para que despertara, sin importar los efectos secundarios de las pastillas. Ella nos explico que los efectos pueden ser pesadillas, mareo y esas cosas leves pero lo que me preocupa es que puede que Scott entre en un estado donde sus sentimientos se intensifiquen, se enojara seguido pero también podrá caer en una terrible depresión, una razón mas para encontrar a Taylor.

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Aviso
Hola lectores aquí un nuevo capitulo, espero que les guste y no se olviden se comentar y votar.
Feliz Lectura :)