Ale

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El encuentro con Ale había dejado un fuerte impacto en mí. Me sentía vulnerable y con miedo de lo que pudiera hacer para dañar mi relación con Beny. Pero no podía permitir que su actitud amenazante me afectara.

Decidí hablar con Beny y contarle todo lo que había sucedido.

Quedamos esa misma tarde en el parque cercano a mi casa. Beny me abrazó con cariño al ver mi expresión preocupada.

Beny: ¿Qué pasa, Morena? Pareces preocupada. ¿Te ha pasado algo? Si te ha dicho algo un tonto lo destrozo.

Aida: Beny, necesito contarte algo. Ale se acercó a mí en la universidad y me amenazó. Parece que está obsesionada contigo y está dispuesta a hacer cualquier cosa para separarnos.

Beny frunció el ceño, mostrando su preocupación y molestia al escuchar lo que le conté.

Beny: No puedo creer que Ale haya llegado a ese extremo. Siempre he sido claro con ella, solo es mi fan y nada más.

Aida: Me quedo más tranquila de saberlo, pero de verdad me da miedo lo que pueda llegar a hacer esa chica.

Beny: No te preocupes morena, solo es una fan loca de unas cuantas que tengo.

Al escuchar eso de Beny en vez de tranquilizarme me alarme más, dios sabe lo que sería capaz de hacer para alejarme de él.

-

Una tarde, mientras estaba en casa estudiando, recibí una notificación en mi teléfono. Era un mensaje de un número desconocido. Abrí el mensaje y lo que vi me dejó sin aliento. Era una foto de Ale abrazada a Beny en lo que parecía ser un momento íntimo.

Mis manos temblaban mientras mis ojos se llenaban de lágrimas. Sentí un nudo en mi estómago y una oleada de dolor y traición recorrió todo mi cuerpo. ¿Cómo podía ser esto? ¿Qué estaba pasando?

Sin pensarlo dos veces, agarré mi bolso y salí corriendo de casa. Mis pies me llevaron automáticamente hacia la casa de mi primo David. Necesitaba a alguien en quien confiar y desahogarme.

Llegué a su puerta con el corazón en la mano y lágrimas corriendo por mis mejillas. David abrió la puerta y su rostro reflejó la preocupación al verme en ese estado.

David: Aida, ¿qué ha pasado? ¿Por qué estás llorando?

Apenas pude hablar, solté un sollozo incontrolable y David me abrazó con fuerza, dándome consuelo y apoyo.

David: Tranquila, Aida. Cuéntame qué ha pasado. Estoy aquí para escucharte.

Entre sollozos y palabras entrecortadas, le expliqué a David lo que había sucedido. Lo que paso con Ale en la universidad y que recibí esa foto que mostraba a Ale abrazada a Beny. Sentía que mi mundo se había derrumbado y no entendía cómo alguien a quien creía conocer tan bien podía traicionarme de esa manera.

David me escuchó pacientemente, su rostro lleno de compasión y preocupación.

David: Aida, siento mucho que estés pasando por esto. Pero antes de sacar conclusiones precipitadas, debemos hablar con Beny y aclarar lo que sucedió.

Aunque mi mente estaba llena de dolor y resentimiento, sabía que David tenía razón. Debía enfrentar esta situación y obtener respuestas claras. Subimos al coche de David y fuimos a buscar a Beny a su piso en L'h.

Al llegar, lo encontramos sorprendido por nuestra visita inesperada. Sus ojos se llenaron de preocupación al verme llorando.

Beny: Aida, ¿qué te pasa? ¿Qué cojones pasa?

Con voz temblorosa y lágrimas en mi rostro, le mostré la foto que recibí. Beny miró la imagen, su rostro mostrando sorpresa y confusión.

Beny: Aida, te juro que no sé de dónde ha salido esta foto.

¿ Beny jr o Simo ElRifi ?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora