Inadmissible Love || Criston Cole

Chapter 18

RESUBIDO 1/4

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Un mes había pasado desde la boda. Y Rhaella estaba preocupada, se mareaba fácilmente y su sangrado de luna aún no llegaba.

Ella sabía que tendría que consumar pronto su matrimonio, no es como que no lo haya intentado, al contrario. Sin embargo, Rickard cree que es porque Rhaella se siente presionada.

Rhaella, con el fin de no levantar sospechas con las criadas, toda la semana que se suponía que tenía que sangrar, fue a las cocinas para guardar un poco de sangre de cerdo en un frasco y durante la madrugada vertía una mínima cantidad en las sábanas.

Ahora se encontraba con su pequeña hermana en brazos, la dulce Helaena.

Alicent no le gustaba tener a Rhaella ahí con su hija. Era un mal ejemplo para ella. Pero lamentablemente, ella sabía que la princesa amaba a sus hermanos y que jamás les haría daño.

— Dime, ¿sir Jackson ya se recuperó completamente? — preguntó Rhaella.

— ¿De verdad te importa? — respondió Alicent con otra pregunta.

— No, en realidad no. Me da exactamente lo mismo. Solo no quería que hubiera tanto silencio.

— Hubo un tiempo en el que te tuve aprecio. Fuiste la única que no me despreció por haberme casado con tu padre.

— ¿Y que hice tan mal como para que me despreciaras de un día para otro? No es como que me importe pero eres la madre de mis hermanos.

— Tú sabes lo que hiciste. — le respondió Alicent con un poco de desprecio.

Rhaella dejó a su hermana en brazos de una de las criadas y con la mirada les pidió a todas que se fueran.

— He hecho muchas cosas, majestad. Debe ser más específica.

— Cogiste con tu guardia real. Y no lo niegues porque sé que es verdad. Tu padre es un ciego al no darse cuenta de la clase de hija...

La princesa se acercó lentamente e interrumpió él brillante insulto que le diría la reina.

— Ten cuidado, Alicent. Lo que insinúas, es traición. Podrías perder tu cabeza por ello.

— Yo soy la reina. Y lo que digo no son insinuaciones. Es la verdad.

— Tus creencias están basadas en el resentimiento de un hombre que está obsesionado conmigo, Alicent. ¿De verdad crees que él te es leal?

— Yo lo salve. Me debe su vida.

— Y tú eres lo suficientemente estúpida como para tragarse toda su mentira. Si yo le propongo a él, estar bajo mi comando, te dejaría en menos de dos segundos.

— ¿De verdad eres tan egocéntrica para creer que todos están obsesionados contigo?

— Solo te digo la verdad.

— Tú y tu hermana son iguales. Ustedes no tienen vergüenza de los pecados que cometen libremente.

Rhaella se rió en su cara.

— No puedo creerlo. — volvió a reírse, pero esta vez, soltando una carcajada. — Estás celosa. Estás celosa de Rhaenyra y de mí. De mi hermana porque ella hizo lo que se le dio la gana y de mí porque me casé con el hombre del que estás enamorada.

Alicent entreabrió sus labios con sorpresa.

— Hablas tonterías, Rhaella. — dijo Alicent levantando el tono de voz.