"Una família diferénte a las demás."

Capitulo 19

Durante el trayécto no hablaron mucho. Ecépto Daniel y Quintos, que se pusieron al día con las cosas que les pasaron durante esos años sin verse en persona.

Cuando llegaron a la mansión una mujer los recivío; no debia tener más de unos 37 años.

Quintos: Cuanto tiémpo, Maria.

Maria: No lo créo, sí eres tú.

Se acercó y lo abrazó con fuerza.

Quintos: Sí, soy yo. Ahm, míra, quiero presentarte a Catriel, Hernán y Merry.

Maria: Encantada de conocérlos. Cualquier amigo de Quintos es amigo mío.

Catriel: Pues...se lo agradesemos.

Maria: ...Apuesto a que sí.

Le dedicó una sonrisa falza, ya que notó el sarcásmo en su voz.

Quintos: ¿Podríamos hablar a solas? Debo comentarte algo.

Maria: Por supuesto, intuí que me pedirías algo así.

Voltéo a mirar a su gente.

Maria: Valentín, dile al résto que los atiendan bién, debo hablar con Quintos a solas.

Valentín: ¡Claro, señora!

Maria: Vamos a mi oficina.

Quintos: De acuerdo. Ustedes, traten de comportárse.

Lo dijo mirando a Hernán y Merry.

Merry: No te lo prometo.

Hernán: Pero lo intentarémos.

Una vez que Quintos cerró la puerta de la oficina, tanto Hernán como Merry comenzaron a recorrer la mansión Smith. Bajo la aténta mirada de los guardaespaldas de Maria Smith.

Merry: Este lugar es demasíado grande.

Hernán: Nuestra casa también lo és.

Merry: Lo sé, pero ustedes tiene perros que corretéan por todos lados.

Hernán: Eso es ciérto.

Ámbos salieron al jardín, para ver la piscina, mientras Catriel tomaba un trago de whisky con Daniel en la sala.

Daniel: Entonces, Catriel, ¿desde cuándo conoces a Quintos?

Catriel: Desde hace unos 12 años, aproximádamente.

Daniel: Eso es interesánte, ya que cuando hizo el trabajo para mi madre hace 5 años, no hablo de tí ni una sola vez.

Catriel: ...Es alguien bastante profecionál, no me sorprénde.

Daniel: Mmm...si tú lo dices.

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Mientras tanto, en la oficina de la señora Smith.

Maria: Lo lamento, es demasíado dinéro.

Quintos: Óye, no puedes decirme éso.

Maria: Se que no és lo que querías escuchar, pero...

Quintos: ¡Nó! ¡Tú me lo débes, todos los cuerpos que sepulté ese día, hace 5 años, te trajéron a donde estás ahora!

Maria solo se quedo mirándolo seriamente, ya que era ciérto.

Maria: Ash...no prometo nada, pero lo pensaré.

Quintos solo se levantó de la silla enfrente del escritório y camino hacia la puerta.

Quintos: Nos vemos mañana.