Cap 4

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Athena siguió abrazando a Bakugo pero cuando él escuchó la voz de kirishima la aparto inmediatamente, ella lo miro confundida y él solo miro al pelirrojo entrar a la cocina.

- ¿Cómo vamos por aquí? ¿Ya está todo listo? - Pregunto Kirishima con una sonrisa entrando.

- ¡Si, ya terminé de cortar los vegetales gracias a Bakugo!

- ¿Y sin gritarte o intentar matarte en el intento?

- Estuve muy cerca de hacerlo - Bakugo se dirigió a la puerta para irse.

- ¿¡QUE!? pero si dijiste que lo hice bien

- Yo no dije eso

- ¿¡Ahhh!?

- Déjalo Athena ¿Me puedes ayudar a servir la comida? - Dijo Kirishima

Athena ayudó a kirishima a servir la comida y luego todos se sentaron a comer.

A la hora de dormir los chicos trataron de buscar un lugar para ella ya que solo había dos habitaciones.

- Descuiden puedo dormir en el mueble - Dijo ella.

- Kirishima vete a tu cueva - Dijo Bakugo serio

La casa de ellos estaba ubicada cerca de las montañas donde habitaban los dragones y justo al lado estaba la montaña de kirishima.

- ¿Por que? No he ido en meses - Kirishima comenzó a quejarse.

- Puedes dormir ahí y Athena en tu habitación.

- No voy a permitir que kirishima duerma en una cueva fría, sucia y aterradora mientras yo duermo en una cama cómoda y cálida - Dijo la chica molesta.

- ¿Qué tal si ella duerme con uno de nosotros? - Dijo kirishima

- No pienso dormir con una humana - El rubio trataba de mantenerse sereno.

- Entonces yo dormiré con ella ¿Qué te parece Athena?

- Me parece bien, no quiero que duermas en una cueva - Athena le dedico una sonrisa al chico.

Narra Athena

Entre a la habitación con kirishima y él fue muy respetuoso conmigo.

- Puedo dormir en el suelo para no invadir tu espacio personal, si no quieres dormir en la misma cama.

- No, está bien... Podemos dormir en la misma cama.

Me acosté y luego él se acercó lentamente y con cuidado a mí.

- No te voy a morder - Le dije al mirar su cara, parecía nervioso o asustado.

- Es que no he estado tan cerca de un humano, he estado entre ellos pero no así de cerca.

- Tranquilo no va a pasar nada.

- Si tú lo dices, confió en ti.

Él se acostó junto a mi y de inmediato se quedó dormido, me parecía muy lindo, me hacia recordar a mi amiga Mina. Me acosté a dormir también pero luego de una hora sentí un pie en mi cara.

- Jajaja así si te pareces a Mina - Dije en voz baja tratando de no despertarlo.

Kirishima estaba en una posición extraña que me hizo acordar a cuando Mina dormía conmigo.

A la mañana siguiente desperté y no pude ver a Kirishima en la habitación, me levanté y fui a la sala, mire hacia una ventana que estaba cerca y vi un gran dragón amarillo que me estaba mirando fijamente, estaba demasiado cerca que solo podía ver parte de su rostro por la ventana.

La Princesa y El Rey de los Dragones (Bakugo y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora