𝕊𝕡𝕣𝕖𝕖𝕟 𝕩 ℝ𝕚𝕧𝕖𝕣𝕤. 𝕌𝕟 𝕒𝕞𝕠𝕣 𝕔𝕝𝕒𝕟𝕕𝕖𝕤𝕥𝕚𝕟𝕠.

𝒞𝒶𝓅í𝓉𝓊𝓁𝑜 𝟩. 𝐵𝒾𝑒𝓃𝓋𝑒𝓃𝒾𝒹𝒶 𝒶 𝒜𝓇𝑔𝑒𝓃𝓉𝒾𝓃𝒶.

Spreen y Rivers pasaron los próximos días haciendo stream y llamándose, tanto por Discord como por WhatsApp, no podían aguantar ni un segundo sin verse, estaban totalmente enamorados, solo que ellos no lo querían publicar para intentar no formar una nueva polémica en las redes sociales. Siguieron haciendo directos hasta que un día Rivers cogió un vuelo a Argetina, ahí fue cuando llegó a Buenos Aires y decidió instalarse en la casa de Spreen, ya que el joven le dejaba estacionarse en su humilde morada sin ningún problema al respecto.

R: ¡Hola Spreen!

S: Hola Sammy, ¿Qué tal todo?

R: pues bien, güey, todo bien.

S: me alegro boluda, bueno, deja que ya subo yo el equipaje.

R: no hace falta Spreen.

R: no, no, tú tranquila, te lo llevo yo.

Spreen llevó el equipaje de Sammy a su respectiva habitación, Rivers se sintió bastante acomodada en el piso de Spreen.

R: wow, está habitación está bien chingona.

S: sí, aquí encerraba a la gente que no se suscribía a mi canal.

R: a la verga, entonces me vas a encerrar.

S: bueno... A ti te doy una excepción.

R: ¿por qué?

S: por ser mi amiga.

Rivers se sonrojó un poco por el comentario del joven argentino, a pesar de que solo dijo de que eran amigos, ella se lo tomó con otra perspectiva, por lo cual le pareció muy fácil sonrojarse de inmediato.

R: bue-bueno, y sobre el tema de la comida...

S: ah sí, pues preparé unas empanadillas de distintos sabores.

R: se me hace la boca agua con tan solo pensar en esas empanadillas.

S: a mí también wacha.

R: oye Spreen.

S: diga.

Sammy le tiró una almohada de su habitación, el actuó rápido y se defendió.

R: ¡guerra de almohadas!

Los dos streamers empezaron a tirar almohadas por toda la habitación, llegó un momento en el que Rivers se puso tan loca que le tiró un colchón a Spreen.

S: vale... Tú ganas.

R: ¡bien!, espera compadre, te ayudo a levantarte.

S: gracias.

R: estuvo bien chingona la pelea, ¿a que sí?

S: pues sí, hay que repetirlo alguna que otra vez.

R: claro que sí.

Los dos amigos se dirigieron a la cocina para cenar, ya que Rivers llegó a Argentina por la tarde noche, los dos comieron y charlaron, pero a Spreen le ocurrió una idea para hacer la cena más divertida.

S: ¿y si hacemos una videollamada con Carre?

R: vale pibe, me gustaría ver al enano de nuevo.

Spreen intentó llamar a Carre, pero el móvil le dejó en comunicando, por lo que tuvieron que seguir a lo suyo.

R: oye Spreen.

S: que pasa.

R: ¿de que otra forma quieres que te llame?

S: pues... Si te digo la verdad, con Spreen ya me es suficiente.

R: vale Buhajeruk.

S: boluda, parece que lo haces a propósito.

R: es que lo hago a propósito.

S: jajaja.

R: estas empanadillas están tan ricas como mis tacos, por cierto, traje unos tacos hechos por mí, si quieres mañana podemos desayunar eso.

S: por mí bien.

Cuando terminaron de cenar, Spreen y Rivers se pusieron sus pijamas y se fueron a sus respectivas habitaciones para descansar.

R: buenas noches boludo.

S: buenas noches compadre.

Los dos se rieron, y más tarde se fueron a dormir, Spreen y Rivers estaban felices, pero Spreen estaba bastante incómodo, ya que no sabía si decirle a Rivers sobre lo que el sentía por ella, le parecía un poco arriesgado, pero a lo mejor lo intentaba, pero estaba claro de que esa declaración tendría un precio muy caro en la relación de estos dos streamers.

▂▃▅▆▇𝓕𝓲𝓷 𝓭𝓮𝓵 𝓬𝓪𝓹í𝓽𝓾𝓵𝓸▇▆▅▃▂