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Salí de la sala con el uniforme habitual y volví a correr hacia el estadio. Me dirigí hacia Mina y Uraraka, que estaban platicando cosas triviales.

—¡Hori! ¡Te volviste a cambiar! —se quejó Mina con decepción en el rostro.

—¡No me iba a quedar así todo el rato! —también me quejé.

—Te veías lindo —agregó Uraraka—. Tanto que unos chicos y chicas preguntaron por ti.

Ambas rieron, sintiéndose traviesas por el hecho de haberme vestido de esa manera.

—¡Dejen de burlarse de mí! —grité un poco en forma de broma.

—¡Es cierto! —dijeron ambas al unísono, señalaron con la mirada a cada uno de los curiosos. Tres chicos y seis chicas—. Pero creo que algunas de las chicas lo hacían por curiosidad y compasión —aclaró Uraraka y apoyó su mejilla en su mano.

Pronto anunciaron que para los que habían clasificado, en el tercer juego se hará una competencia uno a uno, además de decidir si participarían en los recreacionales. Realizaron un sorteo para saber quien se enfrentaría a quién. Pero antes de eso Ojiro levantó la mano y anunció su retiro de los juegos, lo que impresionó a todos.

—Ojiro-kun, ¿por qué? —cuestionó Tenya.

—Apenas recuerdo algo sobre la batalla de caballería hasta casi el final —se notaba que estaba apenado y preocupado por la situación, similar a lo que pasé—. Lo último que recuerdo es que estuve con ese tipo —señaló a Shinso con la mirada—. Y que él hablaba con Hori, pero estaba tan desconcertado como yo.

Voltearon a verme y yo me quedé en silencio mirando a Ojiro, sentí empatía por él, pues habíamos pasado por la misma situación y nunca comprendimos lo que pasó.

—Probablemente sea la singularidad de ese tipo —finalizó—. Sé que es una gran oportunidad y es estúpido desperdiciarla, pero..., ¡todos se esfuerzan demasiado! No puedo estar ahí sin saber lo que realmente pasó.

Las chicas trataban de aporyarle y animar a que siguiera compitiendo.

—¡Se trata de mi orgullo! —dio una pausa—. Además..., ¿qué hacen vestidas de porristas? ¡Incluso Hori-kun estaba vestido así!

Me paralicé junto a las chicas y escondí mi cara con las manos. Ahora más que nunca deseaba regresar el tiempo y nunca haberme vestido de esa manera.

—¡Pero no lo tenías que recordar! —le grité apenado, era un momento embarazoso.

—¡Era inevitable no verte! —todos los chicos presentes asintieron junto a las chicas. Me encogí de hombros y crucé los brazos, negando con la cabeza por haber cometido tal estupidez.

Otro sujeto con el mismo problema también quiso retirarse y por un momento me sentí obligado a hacerlo, debido a que en sus palabras mencionó que no era justo para otros competidores. Sin embargo Ojiro se acercó a mí y tiro un poco de mi mano para apartarnos.

—Hori-kun, ¿puedo pedirte algo? —susurró un poco para que los demás no escucharan. Asentí levemente esperando su petición—. Quiero que sigas adelante.

—¿Seguir adelante? ¿A qué te refieres?

—Tu fuiste uno de los que le declaró la guerra a ese sujeto, te pido que sigas adelante, para que demuestres que cumples con tu palabra. Hazlo, por ti y..., es vergonzoso decir esto pero, hazlo también por mi orgullo herido.

Estuve atónito por unos segundos pero reaccioné, sonreí determinado y asentí.

—Está bien, lo haré por ambos —extendí la mano y el la correspondió feliz. Ahora mantenía un trato con mi compañero, una motivación más para seguir con esto.




Lo Hice Y Te Dejé (BNHA x Male reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora