Capítulo 8

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Nota del autor: pongan atención que las cosas se vienen complicadas, con saltos temporales

Él día después de la pelea me quede esperando a que él llegará, después de todo él fue quien me rogó que lo escuchara, que lo conversáramos y lo arregláramos. Pero Landon nunca llego, ni respondió mis llamadas ni miles de mensajes en donde dejé de lado mi orgullo pidiéndole que me explicara

Mi cabeza comenzaba a jugarme en contra, imaginaba horribles escenarios de que quizás algo le podría haber pasado

Una semana después, un 4 de octubre, Cook se plantó en mi puerta, con una carta en sus manos, mirándome con una lastima que jamás olvidaré, al principio quería decirle que se la llevara, que luego de que Landon me dejara plantada ya no quería saber nada de él, sin embargo no fui capaz de mentirme de esa manera, tome la carta entre mis manos y le pedí a Cook que me dejara sola, eso hizo

Me senté en mi cama con el papel entre mis manos temblorosas, sabiendo que ese mísero pedazo de papel sería capaz de destruirme en cuestión de segundo, de todas maneras lo abrí y comencé a leer

Bella,
Se que en este momento me debes odiar, no te culpo y no pediré que lo entiendas por que no es tu deber entender los demonios que me atormentan
Comenzaré diciéndote algo que quizás no quieras escuchar... hay cosas que jamás querré ni podré cambiar, me refiero a que; si alguien te toca nunca dudare en defenderte con todo lo que soy, con todo lo que tengo y todo lo que puedo. Eso siempre se quedará así y por qué tal como te lo dije en un inicio, soy el villano de nuestra historia y quemare el mundo si eso implica que ni siquiera una ceniza caerá sobre ti.

Debo limpiarme las lágrimas antes de seguir, la letra comienza a verse borrosa y me debato entre seguir y no seguir, se que debo seguir leyendo así que tomo aire y continúo

Sin embargo hay algo que quiero y voy a cambiar, y se que si lo hago contigo a mi lado terminaré destruyendo a la única mujer que he amado y amaré. Me niego rotundamente a volver a hacerte daño con mis palabras y acciones impulsivas, pero también soy consciente de que no puedo cambiar esto de un día para otro y te heriré en el proceso si me quedo a tu lado, y aún que sea un demonio no pienso seguir hiriendo a mi bellísimo ángel.

No es un adiós pequeña, no soy capaz de decirte adiós, y aún que alguna vez lo dije, en realidad nunca me fui. Voy a conseguir ayuda, voy a poner mis mierdas en orden, iré a un puto psicólogo y buscaré una línea de trabajo que no saque lo peor de mi, haré todo lo que haga falta por que seré el hombre que mereces, y volveré a ti, cuando esté listo volveré a ti

No tienes por que esperarme, si encuentras tu felicidad en otra parte me alegro por ti, soy un capullo egoísta pero tu felicidad sigue siendo mi prioridad. De todas maneras volveré a ti, volveré a verte y a abrazarte, y comenzaré a amarte mejor, sin destrucción, tan solo amor, aún que tú no quieras recibirlo, siempre seré tuyo y soñaré con que seas mía

Te lo repito, mi corazón jamás latió con algún objetivo que no sea existir para amarte

Hasta luego pequeña, te amo con todo lo que fui, lo que soy y sobretodo con todo lo que espero ser,
Landon Robinson

Ese mismo cuatro de octubre, después de llorar por horas y horas como una niña desconsolada, comencé a hacer mi maleta para irme de esa ciudad de mierda, dejar atrás la agencia y todas las mentiras que conlleva esta misma, comencé el trámite para sacar una visa en el extranjero

Saque del banco casi toda la herencia que me dejó mi padre, el mes siguiente ya había puesto en venta la casa donde crecí y había arrendado un pequeño apartamento en otro continente, específicamente en Quantico, Virginia, para seguir mi sueño de pequeña, el de convertirme en una perfiladora criminal, donde podría ayudar dando respuestas y previniendo crímenes, en vez de salir dispuesta a disparar

Entre espías Donde viven las historias. Descúbrelo ahora