He's in love with rock'n'roll, woah
He's in love with gettin' stoned, woah
He's in love with Janie Jones, woah
He don't like his boring job, no
And he knows what he like to do
He knows he's gonna have fun with you
You lucky lady!Domingo 31 de Octubre de 1976
La fiesta de Halloween de Hogwarts de 1976 fue tan terrible que la primera orden que se le ocurrió a Remus inmediatamente después de lo ocurrido fue; emborracharse lo más humanamente posible.
No es que era terrible por ninguna razón interna, por supuesto. La comida era deliciosa, como de costumbre: un glorioso cerdo asado dorado con rodajas de manzana cubierta de un flan amarillo pegajoso para el pudín. La fiesta era terrible solo para Remus. Sirius no estaba siendo grosero, ni frío, ni siquiera estaba tratando de evitar a Remus. Era exactamente su terrible dedicación a la normalidad lo que lo hacía tan horrible. Él sonrió. Él rió. Bromeó. Llamó a Remus 'Moony' sin un rastro de vergüenza. Remus no tuvo más remedio que seguir su ejemplo; después de todo, había prometido no decir nada.
Eso sí, de igual forma no tenía la menor idea de cómo decirle a alguien algo así.
— Oye, James, ¿Sirius alguna vez se ha metido en la cama contigo y luego terminaron tocándote un poco?
Oh Dios, ¿Y si en verdad lo hubieran hecho? También estaba Lily, por supuesto, la persona más comprensiva que Remus conocía después de James, aunque la idea de hablar con una chica sobre ese tipo de cosas era mortificante. Mary era la persona con más experiencia sexual que conocía Remus, aunque absolutamente, al cien por cien, no podía hablar con ella sobre Sirius.
No es que ella se hubiera molestado. Cuando la fiesta estaba en pleno apogeo (Remus bebió tres tragos de whisky tan pronto como se presentó la oportunidad), Mary descendió del dormitorio de las chicas vestida para matar con un vestido rojo muy ajustado, lo que hizo que incluso Remus se quedara mirándola durante unos segundos. Roman Rotherhide de Ravenclaw fue el primero en ofrecerle una bebida, y los dos pasaron el resto de la velada completamente absortos el uno en el otro, de una forma u otra.
Remus pasó un rato junto al tocadiscos, poniendo deliberadamente los discos más abrasivos y menos bailables que pudo encontrar. We Will Fall de The Stooges, seguida rápidamente por Sister Ray, y luego un poco de Captain Beefheart por si acaso. Finalmente, fue dominado por un grupo de chicas de cuarto año, que se aliaron contra él agarrando discos de David Cassidy y Bay City Rollers. Después de eso, se dedicó a la ponchera.
Sirius se estaba divirtiendo, obviamente. Él y James eran anfitriones sociables, como siempre, haciendo de las suyas como los buenos herederos de sangre pura que eran. La sala común siguió llenándose a medida que llegaban estudiantes de todo el castillo, y se puso tan caluroso que Remus terminó tomando una botella de Witches Brew que había llenado con whisky, y sentándose solo junto a la ventana abierta, fumando.
Marlene se acercó en algún momento, para ver si estaba bien, y para preguntarle si Sirius estaba saliendo con alguien más, ahora que él y Mary habían terminado. Remus frunció el ceño ante la mirada esperanzada en sus ojos y le dijo que a él le importaba una mierda. Ella frunció el ceño, pero lo dejó solo después de eso.
Alrededor de las nueve en punto, las cosas se pusieron muy confusas. Lo último que recordó fue la perfecta interpretación de Peter y Desdemona de Paradise by the Dashboard Light (obvio que a Peter le gusta Meatloaf, entre toda la música muggle del mundo). Remus recordaba vagamente sonreír como un estúpido mientras los dos se lanzaban por la habitación, rojos y sudando pero pasándose el mejor momento de sus vidas, cantando a dúo a todo pulmón.
You gotta do what you can
And let mother nature do the rest
Ain't no doubt about it
We were doubly blessed
'Cause we were barely seventeen
And we were barely dressed...