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Sebastián Córdova

Hoy había sido mi primer día de clases y puedo decir que ha sido malo. Ya había estado en este Instituto anteriormente, pero tuve que mudarme de Ciudad con mis padres.

Hace poco volví y tenía que continuar con mis estudios, así que heme aquí. No se de donde mis nuevos compañeros han sacado que soy un chico guapo, rudo y hasta cruel. Tal vez mi apariencia o mi seriedad los hace tacharme así, sin siquiera conocerme.

Como sea, tenía que inscribirme en algún deporte o talento para no perder el tiempo. Pensé en fútbol, pero mejor me decidí por algo nuevo como lo es carpintería

Fui a inscribirme allí, me enviaron con el profesor André. El inmediatamente me reconoció, era algo cercano a mi familia y sabía quien era. Me dió la bienvenida y me presentó con mis compañeros como usualmente lo hacen los profesores.

Me asignaron un lugar y fuí hasta el, en donde presté atención a lo que decían que sería la clase. Me puse los guantes y comencé a cortar la madera, pero podía sentir un par de miradas en mi.

Solamente tenía que alzar la vista para encontrarme con un par de chicos un poco más altos que yo, uno de ellos tenía la tez blanca y el otro tez morena.

El de tez blanca tenía los ojos claros, mientras que el de tez morena parecía que los tenía entre cafes y verdes

Para mi sorpresa, ambos se acercaron a mi.

— Hola — me saludo el de tez morena — Me llamo Edson Álvarez, hemos notado que eres nuevo aquí.

— En realidad ya había estudiado aquí — respondí sin emoción alguna. — Pero diganme, ¿nececitan algo? — los miré.

— Hemos notado que no tienes amigos casi, tal vez por ser el nuevo no tan nuevo — comentó Edson.

— Verán, no soy tan sociable — dije, viendo a la madera.

El par de chicos se miraron entre sí.

— Solo somos sociables — habló el otro chico — Soy Israel Reyes — me dijo su nombre.

— Soy Sebastián — dije sin más.

— ¿Y es verdad que eres un criminal? — preguntó Israel, dejando ver su total curiosidad por mi.

— ¡Israel! — le regaño su amigo.

— Peor, vendo intestinos para comprar bocinas para mi auto — respondí tratando de sonar serio y así, poder ahuyentar a este par.

— ¿En que año vas? — preguntó en cambio Edson

— Último año — lo miré, dejando claro que me estaba cansando este cuestionario.

— Bien.. Adiós — dijo el mismo antes de llevarse a su amigo.

Suspire siguiendo con lo mío hasta que la clase termino.

Recogi mis cosas y me despedí de André, antes de salir de su clase.

Quería tomar un poco de aire, así que sali al campo antes de que siguieran las siguientes clases. Me encontré por los pasillos a los mismos chicos, pero pasé de ellos para salir al campo.

A lo lejos vi a varios practicando el deporte en el que estaban, pero en el área de arco estaba una chica que me llamó la atención.

Allison Vidrio, recordé su nombre gracias a que Mr Lozano la envió al detención por reírse en su clase.

𝐃𝐢𝐞𝐳 𝐂𝐨𝐬𝐚𝐬 𝐐𝐮𝐞 𝐎𝐝𝐢𝐨 𝐃𝐞 𝐓𝐢 | 𝐒 𝐂. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora