𝐃𝐢𝐞𝐳 𝐂𝐨𝐬𝐚𝐬 𝐐𝐮𝐞 𝐎𝐝𝐢𝐨 𝐃𝐞 𝐓𝐢 | 𝐒 𝐂.

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SEBASTIÁN CÓRDOVA.

Estaba en mi habitación pensando las cosas  con la mocosa rebelde y llegue a la conclusión, de que si me pasé un poco con ella. No debí ser tan mierda con ella, de alguna manera Allison fue buena amiga, a su manera pero lo fue, de las pocas personas que me decía que no fumara por que eso mataba y aunque muchas veces la mandaba al carajo, internamente agradecía que se preocupara por mi.

Debo decir que cuando supe que Allison le había roto la nariz a Jana, me sentí tan orgulloso de ella. Esa niña era demasiado creída, la verdad no me cae nada bien por que es más odiosa que Allison y su hermana juntas.

Al fin hizo algo bien esa niña.

Seguí dando vueltas en mi cama hasta que se me ocurrió algo, seguramente me llevarían a prisión pero tenía que intentarlo, era mi deber. Le envié unos mensajes a Israel y Edson para que vinieran ayudarme con lo que tenía en mente.

— ¿Estás seguro de esto Sebas? — preguntó Edson

— Claro que si, le debo una disculpa a Allison — dije seguro, Israel me vió con una de sus cejas elevadas.

— Si claro, todos sabemos que Allison no es alguien tan fácil de convencer — argumentó Israel— pero veamos que pasa.

— Solo espero que su padre no se ponga de roñoso — le siguió Edson

Recordé que nunca había Tratado con el Papá de Allison, ni siquiera lo conocía, puesto que siempre cerraba la puerta o se escapaba por el balcón. Solamente la escuchaba quejarse de el como si lo odiara o algo así, no se exactamente como sea esa relación.

— Eduardo Vidrio no es alguien tan fácil de tratar — Israel se acercó a decirme. — desde que la madre de Allison y Nailea falleció, el se ha vuelto alguien muy sobreprotector con sus hijas.

— No creo que sea tan exagerado — dije tranquilo.

— ¿Entonces dime por que crees que Nailea casi no salía hasta que Alan la comenzo a cortejar? — preguntó con un tono irritado al mencionar a su rival de amores.

— Allison y Eduardo no tienen la mejor relación de padre e hija que se puede ver — comentó Edson después de estar en silencio— Podría decirse que ella le tiene cierto rencor.

No es verdad ¿Que tan malo podría ser Eduardo Vidrio?

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— sigo pensando en que esto es una tontería. — Murmuro Edson por milésima vez mientras conducía a la casa de Allison— No quiero morir joven.

— Ya no seas melodramático por favor — pedí mientras doblaba la esquina — será rápido, yo no me puedo subir con facilidad.

— No puede ser que Allison sepa subir sola por la ventana y tu no, que decepción — se burló Israel ganándose una mala mirada de mi parte.

Imbéciles.

Me estacione frente a la casa de Allison, seguramente a esta hora ya estaba durmiendo pero me vale un carajo, si es necesario la voy a despertar.

Los tres bajamos del auto y nos acercamos a donde estaba la ventana de Allison, definitivamente no se como demonios no se mató cuando saltó de ahí