• 23 : Epílogo

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Narrador omnisciente




Allison se encontraba afuera de su casa escribiendo cosas al azar o dibujando cualquier garabato en su libreta. En todo el día había estado ahí, no había salido de su hogar y mucho menos había recibido algún mensaje de Sebastián.

Aunque no es que lo esperara o algo parecido, simplemente se sentía mal y sabía que él era la razón, incluso el único que podía hacer la sentir un poco mejor.

Nailea se acercó a su hermana mayor con algo de cautela, su padre la miraba desde el otro lado, por supuesto que ya se había dado cuenta del cambio de humor de su primogénita.

— Hola — la saludo su hermana — ¿Quieres un poco? — preguntó ofreciéndole un vaso con agua de naranja.

— Claro, gracias— Allison tomó el vaso y le dió un trago de inmediato

— Israel y yo iremos al lago a remar un rato, ¿Quieres venir con nosotros? — la invitó rogando interiormente que Allison dijera que si y que volviera a salir y sonreír como lo hacía antes

— Ah... No, vayan ustedes — Nailea suspiro cuando vió a su hermana seguir haciendo círculos en esa libreta.

Ella y Sofía ya habían intentado de todo, pero nada funcionaba para que Allison mejorara.

— Escucha...— pensó en las palabras que iba a decir — Se que te sientes mal por todo lo que pasó con Sebastián, pero...

— De todas formas iba a suceder — la voz de Allison la interrumpió — El no era quien decía ser y no es que yo esperara que fuera un príncipe azul tampoco, pero bueno, sucedió y ahora soy la burla de todos. — su voz sonaba amarga — creo que debo reconocer que las relaciones no son lo mío.

Israel llegó a la casa de las hermanas Vidrio y se dirigió al patio trasero donde las dos estaban conversando, el estaba al tanto de la situación de Allison y fue su idea invitarla a remar pero parecía que no había funcionado

— Hola, ¿como están? — Israel se golpeó mentalmente cuando pregunto eso cuando sabía la respuesta, pero ya era tarde.

Allison bajó la mirada para seguir con lo que estaba haciendo.

— Mejor que nunca— respondió la misma Allison sin ver a su amigo.

— ¿Segura que no quieres ir con nosotros? — pregunto una vez más Nailea, con la esperanza de que Allison cambiara de opinión.

𝐃𝐢𝐞𝐳 𝐂𝐨𝐬𝐚𝐬 𝐐𝐮𝐞 𝐎𝐝𝐢𝐨 𝐃𝐞 𝐓𝐢 | 𝐒 𝐂. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora