15- Viaje "familiar"

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6 de la mañana.

Después de haber dejado todo listo...

Jorge se fue. Luego se encontraba en el aeropuerto, esperando a que llegara su padre para tomar el vuelo juntos.

A lo lejos lo pudo divisar, estába acompañado de su nueva esposa, Clara. Junto con las dos molestias, Jessie y su fastidiosa amiga, Elizabeth.

Que ironía verdad, quién iba pensar que su ex novia de la escuela iba a convertirse en su futura hermanastra, por así decirlo. Y peor aún, iba a hacer mancuerna con su otra ex novia, que le causó muchos problemas hace algunos años.

Pronto abordaron el avión y se acomodaron cada quién en su lugar correspondiente. Por suerte, no tuvo de compañía de asiento a las chicas que le estaban haciendo la vida imposible.

Después de 5 largas horas de viaje, habían llegado a Clearwater Florida, donde pasaría los próximos 2 días. Su padre había rentado una gran casa a la orilla de la playa, como el dinero le sobraba podía hacer lo que quisiera con el. Pronto se dijeron a la casa para instalarse.

Cuando llegaron, su padre dispuso a dar un recorrido a la casa que había rentado, mientras que Jorge salió y se sentó en una silla de afuera para llamar a Silvia.

Silvia previamente, después de que Jorge se había ido, ella aún con pijama, manejo hacía la dirección en donde quedaba la casa de Jorge para recoger a Lizzy. Regresó a su casa con ella y como no tenía nada que hacer en la mañana, se volvió a dormir tranquilamente, acompañada de la perrita. Hasta que su celular empezó a resonar en la habitación.

En la llamada:

—Hola Jorge. —dijo medio adormilada.

—Hola Silv, ¿Te desperté? —sonrió a través de la llamada.

—Solo un poco —contesto riendo—, ¿Ya aterrizaste del viaje?

—Si, hace unos minutos llegamos, ya hasta nos instalamos en la gran casa que rento mi padre para estos días —rodeo los ojos mientras negaba la cabeza.

—Enserio, y como te ha ido con la plástica y con la cola de zorrillo. —dijo sarcástica.

—Por suerte no he tenido ningún tipo de contacto con ellas, jaja.

—Me alegro escuchar. —declaro pacíficamente.

—Jorge rio y luego pregunto— ¿Oye ya recogiste a Lizzy? Solo pregunto, no es presión ni nada. —dijo tranquilo.

—No te preocupes, ya me la traje después de que te fuiste, está durmiendo tranquilamente en éste momento.

—Como me gustaría estar ahí para dormir tranquilamente contigo y con Lizzy.
—confeso.

—Ehh, es muy tranquila la perrita verdad.
—dijo nerviosa tratando de evitar la confesión, tan solo de imaginarse a ella y a Jorge abrazados en la cama mientras descansan pacíficamente, cuidando de Lizzy, le daba una extraña y linda sensación escalofriante.

—Si lo es —habló Jorge—. Bueno linda, te tengo que dejar por qué me tengo que cambiar, iremos a comer. Te mando muchos besos Silvia.

Sonrojada por sus palabras le contesto:
—Esta bien, te portas bien Jorge, te mando besos igualmente.

—Y a dónde me mandas los besos.
—pregunto con picardía.

—Tonto —rio nerviosamente—. Adiós guapo.
—Se despidió.

Y termino la llamada.

El día transcurrió rápido para Jorge, fueron a comer a un gran buffet, y el se alejo un poco; trato de evitar cualquier tipo de contacto con Jessie y Elizabeth, siempre mantuvo una gran distancia entre ellos, no le iban a joder éstos días.

Después fueron a caminar al gran muelle que se encontraba en la playa. Vieron los diversos puestos que se encontraban en el lugar, y Jorge aprovecho para comprar un lindo collar de piedras y pequeñas conchas coloridas para Silvia. Se lo daría cuando regresará.

Recorrieron toda la playa, visitaron las atracciones que rodeaban al lugar. Así pasaron todo el día, explorando Clearwater beach, al siguiente día iban a turistear la ciudad.

Por otro lado Silvia se dispuso a trabajar en su casa, cuando terminó se dió un descanso y alimento a la perrita para luego jugar un rato con ella, era realmente tierna.

Prontamente llegó la noche, ceno algo ligero y se dirigió a su habitación. Silvia puso una de sus películas favoritas, subió a Lizzy a su cama y la arropó junto a ella cariñosamente, la perrita contenta accedió a las caricias de Silvia.

Pronto Silvia quedó dormida.




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