Capítulo doce

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Capítulo doce


Una textura diferente, piel cálida sobre su mejilla, lo despertó sin obligarlo a abrir los ojos. Primero quería entrar en sí antes de salir de ese pequeño trance entre estar dormido y despertar.

Reconoció, ahora sí, que eran unos dedos los que se deslizaban suavemente sobre su rostro. Sus ojos comenzaron a intentar abrirse al comprobar la sensación. Pero inmediatamente cuando sus ojos se abrieron, ya no tenía a nadie mirándolo... Solo escuchó unos pasos apresurados, y una bajada rápida en la escalera... finalmente, un portazo. Tuvo la sensación de quizás haber interrumpido un momento de reflexión por parte de Zayn... ¿Por qué estaba seguro de que esas manos eran de su mejor amigo? Pues, quizás jamás logre confundirlas luego de aquella maravillosa noche.

Una vez que logró sentarse sobre la cama, miró en la mesa de noche, el reloj. Tomó una pequeña nota pegada con cinta adhesiva.


Si tienes hambre abajo seguro te darán algo para desayunar.

Tu ropa de anoche está limpia sobre la repisa de la esquina.

Llamé a tu madre y ella ya sabe que estás aquí, y que regresarás antes de las diez de la mañana.

ZAYN

Por muy agradecido que estuviera, de que la mayoría de sus preocupaciones estuvieran resueltas, no pudo evitar sentir un dejo de desilusión al no ver algo referido a la estupenda noche que habían pasado en ese pequeño pedazo de papel de agenda. Sabía que cosas como estas no iban a pasar así como así, pero todo ya era demasiado confuso, Zayn lo era a veces. Hace unos pocos segundos lo tenía acariciándolo como si de un bebe se tratase, y una vez habiendo despertado, lo había oído huir despavorido cual pájaro asustado. Era una de sus grandes características, y no era algo bueno si lo pensaba, porque Zayn solía ser bastante organizado y justo, cuando estaba enojado. Ahora mismo tenía su ropa limpia, el desayuno listo, y una madre despreocupada de que su hijo estaba a salvo y no desmayado en el cordón de una vereda. Y todo eso sin decir una palabra. Definitivamente estaba enojado, Liam no sabía si era buena señal... Después de todo la culpa era de los dos... Zayn por pedirle que le haga el amor, y él mismo por concederle la petición.

Se dirigió al baño porque si no se lavaba la cara seguiría pensando que todo esto era un absurdo sueño de esos que surgían cuando uno se duerme con la telenovela de fondo. Se miró al espejo y pudo ver esa marca en su cuello... no saldría fácil. Sonrió mientras se la tocaba con los dedos, pero eso solo complicó las cosas, haciendo que todos sus recuerdos desorganizados y despilfarrados por toda su mente producto del sueño, se alinearan, dando lugar al nítido recuerdo de la noche anterior.

Se mordió el labio porque ni él mismo, estando enamorado de Zayn, podía entender a quién demonios se le ocurre hacer una locura como esa con su mejor amigo de toda la vida. Los gemidos tan claros como los oyó en su oreja en el instante en que pasaron resonaban en su cabeza como si fuera un audio que se repetía constantemente sin forma de detenerse. Como una bocanada de aire helado, le golpeó la culpa... Cada recuerdo era como una puñalada, que le punzaba en el pecho, si seguía recordando quizás moriría de vergüenza... o se iría otra vez.

Suspiró y sin esperar nada más, salió de su vista, tomó su ropa y se decidió a vestirse. Quería bajar, despedirse de la familia de Zayn y largarse de allí. Todavía tenía que regresar a su casa, tenía que hacerse cargo de Camilla, después de todo, ellos habían ido juntos al boliche y él la dejó sola.

***

Abrió la puerta de su casa, y trató de concentrarse en buscar las llaves de su auto para ir al hotel donde Camilla se hospedaba, luego de que se sintiera culpable por invadir su casa, incluso aunque todos sus familiares la amaran y estuvieran de acuerdo con su estadía.

The Back Road (Ziam Fanfiction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora