🦋MI ANGEL🌊

CAPITULO XVI

HABIAN SIDO TRES AÑOS ; TRES AÑOS COMPLETOS DESDE QUE shinobu había salido del castillo. Tres años desde que había estado sin tomioka.

Tres años parecen no ser nada; sin embargo, para ella lo era, por mucho que no quisiera perderse a un tramposo en dos tiempos, todavía lo quería. Él atormentaba sus pensamientos todos los días y shinobu no sabía cuánto tiempo más podría soportarlo.

Así que decidió que volvería. Sólo para hablar con él. No había perdonado a tomioka por lo que había hecho, pero cuando su ira se calmó, pudo entender su razonamiento detrás de ocultárselo.

Shinobu se dio cuenta de que tal vez su enfado ni siquiera era por el hecho de que él tuviera una esposa, porque ¿quién no la tendría? 3000 años es mucho tiempo de vida, y es natural que haya buscado compañía.

No, su ira era causada por sus celos, el hecho de que alguien además de ella había sentido a tomioka de la manera en que ella todavía lo había hecho, el hecho de que no sería capaz de compararse con yae la esposa de aquel demonio que robo su corazón pero una voz tan dulce le habia hablado solo sonrio para ver aquel reflejo de su amor pero al llegar la noche.

Estas cosas dieron vueltas en la cabeza de shinobu durante todo el camino a la mansión. Incluso mientras estaba de pie frente a la mansión, no pudo evitar preguntarse si estaba tomando la decisión correcta pero no dira nada de lo que paso esos últimos tres años ni el fruto de aquel amor que tenían y aun tienen. Lo habia decidido no decirlo hasta el dia que sienta que es el momento correcto.

-Tú puedes hacer esto shinobu.-murmuró para sí misma, dándole una ligera palmada en las mejillas. Shinobu finalmente encontrada se armó de valor y dio un paso, colocando su pie derecho en el primer escalón de la entrada.

-Vaya, eso fue más fácil de lo que pensaba.

Pronto comenzó a caminar a un ritmo normal. Mientras miraba alrededor de mansión, se dio cuenta de lo pronto que se había convertido en su hogar pero aun no para el retrato de su amor.

Conocía cada rincón, cada cuadro, cada ruta de la mansión. Sin embargo, lo que lo hizo parecer tan familiar fue la gente. Los ojos de Shinobu se llenaron de lágrimas mientras momentos con tomioka pasaban por su mente. Se conocían desde hacía no más de tres años con 11 meses, pero se sentía como una eternidad.

Sentía que lo conocía por dentro y por fuera, y eso era lo que la había hecho enamorarse tanto de él. Su alma. Se detuvo en seco cuando las puertas cerradas de la sala del trono se abrieron paso en sus periféricos, pero no era el momento de retroceder. Aceleró el paso y abrió las puertas con todas sus fuerzas.

Todos los rostros se giraron para mirar a la mujer que se entrometía en la asamblea, pero el rostro familiar que shinobu estaba buscando no estaba a la vista , uzui solo observaba como el cuerpo de ella paso a ser de una joven a ser de toda una hermosa mujer, aquellas caderas anchas y esos senos mas voluminados que antes.

-¿Dónde está mitsuri? Celeste cuestionó a uno de los dos gobernantes sentados en el trono, el tercer asiento parecía tan solitario sin su amo. En un instante, Mitsuri estaba de pie frente a ella. Él la agarró por la parte superior del brazo con suavidad y la sacó de la habitación.

-Ven.

Shinobu comenzó a moverse en la dirección en la que se había girado la mujer , con los brazos colgando a los lados.-¿A dónde vamos? -Mitsuri, que había estado caminando unos centímetros por delante de shinobu, se giró para mirarla, con una expresión triste en su rostro.

-tomioka, está... eh, está enfermo.

Shinobu rápidamente lo alcanzó.-¿Por qué? ¿Qué le pasa?

-El rechazo del vínculo de pareja lo ha lastimado profundamente; fue tan grave que también se siente débil físicamente y por eso está en reposo en cama. De pie arraigada en su lugar, la mandíbula de Shinobu se abrió en estado de shock sin saber que unas pequeñas manos comenzaron a buscarla por  la sala del trono.