Reencarné en una Paloma

Comprensión de Jaula

Elegí conocimiento. El poder es fútil si no sabes manejarlo. La gloria es volátil. El triunfo personal. El conocimiento da poder, pero no poder que se desvanece, ni gloria pasajera o triunfo único. Platón lo dijo en su día, el camino del conocimiento eleva primero a uno, pero sirve para enseñar a los que no tienen tal sabiduría a cómo despertarla. Creo firmemente en esa afirmación. Además, en parte el saber es poder. Entonces, deseo conocer bien todo. Esperar que nuestras suposiciones sean correctas y no haber cometido ningún error.

-Anti ti se abre la historia-

Escucho una extraña voz que refleja calma, es similar a comprensión pero más femenina. ¿Es acaso una parte de los recuerdos de la verdadera forma de comprensión? Realmente no lo sé.

Ante mí comienzo a ver formas indistinguibles, la primera de todas, pese a no poder ser descrita, a su vez es algo que se intuye desde dentro. El creador estaba en ese momento. Veo al creador frente a mí. Una luz más allá de todo lo mesurable que se extiende por encima de lo que el común de los mortales considera infinito. La luz de Dios.

-Y vinieron las ideas del señor. Del señor todo vino. Demiurgo para guiar las ideas a lo material y Espíritu para guiar a las futuras creaciones a las ideas. Todo lo físico fue conformado por el primero de estos dos, la ciencia, las artes, las mates, todo fue puesto y moldeado por su mano. En cambio, Espíritu fungía como ese saber que ayuda a elevar, un conocimiento que traía por el plano del creador a los seres vivos que han adquirido el saber suficiente con las pistas de la creación-

La primera parte de la suposición era verdad. Lo que comunicó Merlín, lo que yo suponía y lo que comprensión dijo parece ser respaldado por estas palabras. La verdad se estableció desde los conocimientos previos, pero se realza con los nuevos.

-Vino la creación. El cielo, el averno, los ángeles y otras razas semejantes. Las creaciones fueron dadas a luz-

Los límites de la creación fueron difusos, de todas maneras, como si algo preocupase al creador de todo, puso una muralla. En las afueras de la última creación seres que no podían ser cognoscibles se crearon, entidades similares a los leviatanes en relevancia o quizás superiores. Los entes que no seguían los paradigmas del resto de la creación hacían una especie de muralla a unos exteriores desconocidos o eso parece, pero ya caería en un terreno de especulación cuyo sentido sería nulo.

-Háganse las pruebas-

Dios quiso ver qué modelo funcionaba más. Creaciones más pequeñas y más grandes se dieron, cada una respaldada por una hipótesis científica que luego los humanos desarrollarían. Humanos, una desgracia en parte. Lucifer se rebeló cuando se enteró de la existencia de esta raza y su nuevo papel en la creación tras bastó tiempo de su existencia. La guerra estalló, pero fue resuelta como todos ya saben. Por otro lado, los inf, seres creados para proteger universos se establecieron, se quería preguntar al señor el motivo de estos después, pero... Después... Dios desapareció.

-¿Por que?-

El saber de mis recuerdos o más bien de los de comprensión no puede contestar el motivo y yo, menos aún. La cosa es simple, el trono que gobernaba sobre todas las creaciones ahora estaba vacío. Entonces, quedaba una duda, ¿cómo se decidiría el nuevo Dios? Alguien debía centrarse en ese trono ¿no? El trono que el creador dejó por sí acaso, el asiento que si alguien obtenía por mérito justo se volvería el nuevo ente supremo por encima de las ideas y las dimensiones. El que lo tomase superaría la idea misma de límite, se volvería lo ilimitado y lo infinito sería tan solo su extensión. ¿Entonces quien debía juzgar la dignidad? Se buscaron precedentes y solo había uno. Un ser que de humano pasó a tener tal relevancia o más que los ángeles de mayor rango, aunque luego decidió marchar y ningún ángel lo recordaría... el espíritu debía ponerse de acuerdo con las huestes del señor para seleccionar un nuevo creador.